Venezuela es un país que cuenta con diversidad de paisajes y ambientes, ideales para el turismo. Las playas, montañas, ríos, desiertos y llanos forman parte de los escenarios que se pueden visitar, en los que las actividades y deportes que se pueden practicar son variados, todo depende de la región que se seleccione.

El estado Aragua es un destino versátil. Tanto venezolanos como extranjeros pueden elegir entre el clima frío de la Colonia Tovar o el calor tropical de sus costas (Choroní, La Ciénaga, Cuyagua). Lo mismo ocurre con los deportes.

En este estado están las mejores montañas para practicar vuelos en parapente. En la carretera que va desde La Victoria hacia la Colonia Tovar está Placivel Mágica, un valle rodeado de montañas en el que por más de 24 años las personas han disfrutado de esta experiencia extrema en las alturas.

A pesar de que a las personas les causa nervios correr hacia el precipicio, desplazamiento que permite alzar el vuelo del parapente, el contraste entre los tonos de azul del imponente cielo y el verde de las montañas los hace querer acercarse y experimentar este paseo en las alturas, que dura entre 10 y 15 minutos.

Leonardo Castro, encargado de la logística de Placivel Mágica, es testigo cada fin de semana de la energía con la que se conectan las personas. Destacó que es un paseo placentero que hace que las personas se relajen, aprecien el paisaje y bajen felices luego de completar el recorrido.

Todas las personas que laboran allí se caracterizan por prestar un servicio que busca complacer a los visitantes. La atención que brindan hace que agencias de viaje como Sorocua los pongan en el primer lugar de su lista de recorridos.

Despegue y aterrizaje

“Chucho Volador”, el piloto más popular de Placivel Mágica, detalló a El Nacional Web que cuentan con parapentes modernos y tecnológicos que tienen sensores que miden la velocidad del viento, lo que les facilita organizar sus movimientos en el aire.

Tanto Leonardo Castro como “Chucho volador” destacaron que lo más importante al momento de despegar es que la persona esté relajada y no deje de correr hacia el vacío, hasta que el piloto le indique que suba los pies. Automáticamente el parapente se coloca en forma de silla y ambos (piloto y usuario) estarán sentados apreciando el paisaje.

Cualquier persona que no pese más de 100 kilos puede practicar este deporte. Las condiciones atmosféricas permitirán que el parapente se eleve tanto como se pueda.

“Chucho Volador” aseguró que todas las horas son buenas para volar; sin embargo, él trata de esperar que el viento tenga fuerza en el momento del despegue, debido a que se le hace más sencillo.

“Chucho Volador”, que desde hace 13 años vuela con pasajeros, es muy atento con los usuarios. Durante todo el recorrido va conversando, haciendo que el viaje sea ameno. Su record es de 16 vuelos al día, pero su meta es hacer 20.

Cuando el paseo va por la mitad del tiempo, el piloto llama por radio a Castro para que acerquen alguna de las camionetas a la pista de aterrizaje, de este modo las personas no tienen que esperar tanto tiempo cuando aterrizan.

En Placivel cuidan cada detalle para que las personas queden contentas con esta experiencia extrema, es por eso que “Chucho volador” asegura que los usuarios quedan con ganas de volver al estado Aragua para disfrutar de sus bondades, teniéndolos como primera parada.

Al volver a poner los pies sobre la tierra las personas observan todo el paisaje con una nueva perspectiva, esa que los invita a conocer más de la Colonia Tovar, un excelente atractivo turístico lleno de lugares y experiencias por descubrir.


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