San Juan, o el Viejo San Juan como le llaman ahora, era, junto con Cartagena de Indias, Santo Domingo y Panamá, una de las fortalezas clave del imperio español, cuando este dominaba el comercio atlántico. De aquella época quedan huellas: los muros de la ciudad y sus principales edificios siguen en pie aunque, ahora, en lugar de militares la invasión es de miles de turistas al día.
El Castillo de San Felipe del Morro, con sus espectaculares vistas al Caribe, y el fuerte de San Jerónimo son dos visitas obligadas. Para hacerse una idea de este entorno vale decir que en las playas que rodean la península en la que se sitúa la ciudad antigua se rodó la película Piratas del Caribe. No defraudan. La entrada cuesta 7 euros y permite entrar a ambos monumentos en un plazo de 24 horas. Se ofrecen visitas guiadas gratuitas que los dan guardaparques oficiales y que, además de las explicaciones, permiten entrar en zonas no abiertas al público.
Ambas edificaciones protegían lo que es la ciudad vieja, que hoy alberga casas de los siglos XIX y XX. En esta zona se aprecia la arquitectura colonial colorista y edificios de comienzos del siglo pasado típicamente estadounidenses, que recuerdan los de Miami, o como el caso del Capitolio de Puerto Rico, una especie de réplica de la Casa Blanca. Entre sus calles empedradas, con iglesias, tiendas de moda y artesanía, bares y terrazas destacan las plazas de Armas y de Colón, que trasladan al viajero a los últimos tiempos de la Colonia.
Tours y descanso. Otro punto que no debe perderse es el Paseo de la Princesa, con sus vistas a las murallas. Aunque el lugar se disfruta de todas formas, los interesados en la historia pueden hacer un tour guiado, con alguna de las empresas que lo ofrecen (touroldsanjuan.com) o de guías locales (www.toursbylocals.com/San-Juan-Tours). También hay un free tour dos veces al día por la zona colonial (www.freetour.com/es/san-juan).
El plan perfecto es combinar los paseos con descanso y baño en alguna de las playas en el mismo Viejo San Juan, algunas con apenas visitantes como las cercanas al parque Tajamar y otras muy populares, con música y gente bailando como la de Punta Escamaron. La zona de playa más estándar (con todo tipo de servicio) está en la zona de Condado o Isla Verde, donde se ubican los hoteles de las grandes cadenas, aunque es necesario llegar allí en taxi (15 minutos).
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Ocio organizado
El espíritu estadounidense de Puerto Rico se nota en la amplia oferta de ocio organizado. Para quienes quieran conocer la ciudad de forma activa existen muchos puntos de alquiler de bicicletas, paddel surf y piraguas, sobre todo en la zona de la laguna del Condado.
También se ofrecen muchos tours de un día en barco para conocer destinos cercanos, hacer snorkel o salir de pesca en un yate. Ir de compras (en un día de lluvia) para los que disfrutan comprando en outlets y marcas estadounidenses, es una opción. Pero hay que desplazarse hasta el Mall Las Américas, que tiene 250 tiendas.
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Capital del ron
El ron es la bebida nacional, como ocurre en otros rincones del Caribe. Pero Puerto Rico ha apostado por explotar el ron de calidad. La visita a la destilería de Bacardí, que tras la revolución cubana trasladó aquí su fábrica, es indispensable. Aunque no es la única. Hay otros muchos rones locales como el DonQ, una joya local, o el Rom del Barrilito. En el Paseo de la Princesa hay un bar flagship donde se pueden probar todos los rones producidos localmente.
Un buen punto de partida para descubrir el Viejo San Juan es ir de bar en bar, disfrutando de los diferentes cocteles con base de ron. Rutas de bares, recomendaciones de cocteles, festivales del ron y marcas gourmet en www.rumroute.com/routes/. No por casualidad Puerto Rico se ha autonominado Capital Mundial del Ron.
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Conviene saber
– Puerto Rico es un Estado Libre Asociado de Estados Unidos, por lo que es necesario tener visa o ESTA para entrar en la isla. Web oficial de turismo: www.seepuertorico.com
– Los taxis cuestan 15 – 20 dólares desde los hoteles de Miramar o Condado hasta el Viejo San Juan.
– En la zona antigua hay pequeños hoteles y casas de huéspedes modestas, con la ventaja de estar cerca de las principales atracciones, tan cerca que se puede ir a pie.
– En abril, mayo y junio, de acuerdo con el portal Trabber.com, los precios de alojamientos comienzan desde 50 dólares la habitación en casa de huéspedes en el Viejo San Juan y desde 150 dólares en hoteles de Condado, Miramar o Mila Verde.