A las 6:00 pm comienzan a llegar los ciclistas. Montados en sus propias bicicletas o trasladados en vehículos, poco a poco van ocupando los espacios de la plaza Glorias Patrias, un punto de acceso, que no es el propio centro de la ciudad de Mérida. En solitario o en grupo, familias enteras, pandillas de amigos, niños de 5 años de edad en adelante y adultos de tercera edad hasta de 80 años. Es una multitud colorida que conversa, comparte y se anota en una lista que al final servirá para las rifas.
Es La Rodada Nocturna de Mérida, que por tres años consecutivos se realiza dos jueves de cada mes bajo la organización de María Fernanda y Francisco Javier Ramírez. El propósito, más allá de hacer visible la comunidad ciclística, es la necesidad de compartir la vía y los espacios públicos con aquellos que se desplazan por placer o trabajo en uno de los vehículos más antiguos, saludables y no contaminantes de la historia.
Estos circuitos nocturnos en bicicleta son una excelente opción para conocer, recorrer y disfrutar los sitios más significativos de la ciudad de Mérida, como por ejemplo el centro histórico; las plazas Bolívar, Milla, El Llano, El Espejo y Belén; las avenidas Américas, Los Próceres y Andrés Bello; y el mercado principal.
Envueltos por la neblina que en muchas ocasiones acompaña, son un buen pretexto para aprender a rodar en grupo, hacer nuevos amigos y convertirse en ciudadanos de primera al respetar las normas de tránsito. Si visita Mérida, anímese. Y si no cuenta con la bicicleta, puede alquilar alguna en las agencias de turismo de aventura en la plaza Las Heroínas, donde está el teleférico.
Ciudad recuperada. Las noches han sido cubiertas por un velo en la mayoría de las ciudades de Venezuela, pero en Mérida, los ciudadanos tratan de recuperarlas, al integrar la ciudad, la familia, los amigos y la bicicleta. “El fin es promover Mérida como una urbe más amigable, recuperando espacios con nuestras bicicletas, rodando seguro”, expresa Francisco Ramírez.
La ruta es planificada por ambos organizadores, directores también de la escuela Los Maitines Bike, que agrupa hasta 120 ciclistas. Una semana antes se hace el recorrido en vehículo para evaluar los riesgos (como huecos, alcantarillas defectuosas e iluminación) y el correcto funcionamiento de los semáforos, en la búsqueda de alternativas seguras y divertidas, así como la disponibilidad de plazas y parques como espacios para el reagrupe durante las dos horas aproximadas de recorrido. Una vez definida, se publica en las redes sociales para que todos tengan acceso a la información. Estos recorridos son gratuitos y en el punto de llegada varias empresas locales ofrecen obsequios que se rifan entre los participantes.
No hay límites de edad ni de condición física. Toda la experiencia busca rodar por placer de noche y en grupo, contra todo pronóstico de inseguridad, falta de luz y otros servicios públicos.
Los únicos requisitos son una bicicleta en buenas condiciones, casco, linterna, hidratación, abrigo y ropa de color o reflectante. Debe seguir las indicaciones de los guías, nunca adelantarlos y acatar las normas de tránsito vehicular y peatonal. Si le preocupa su condición física, tenga en cuenta que nadie se queda atrás, por ello se ejecutan los “reagrupes”, donde se espera a los rezagados,. Siempre se va en grupo y adicionalmente vehículos de apoyo acompañan durante todo el recorrido.
Como cierre de año se realiza la Gran Rodada Nocturna navideña, con la compañía de un Santa y música. Se recorren calles y avenidas a puro pedal, para finalizar en la iglesia San José Obrero, donde el sacerdote, quien también es ciclista, hace la misa de aguinaldo. Esa noche las camisas de colores, las licras, los cascos y las bicicletas toman los pasillos de la capilla en la avenida 16 de septiembre.
Bienvenidos a la Mérida de las dos ruedas.
El dato
Más información por redes sociales @mtbmeridavzla y el correo [email protected]
Teléfonos: (0414) 306 6594 / (0426) 371 8449