El español Rafael Nadal ganó el Masters 1000 de Madrid al imponerse en la final al austriaco Dominique Thiem por 7-6 (10/8) y 6-4.
Nadal mantuvo así su racha de imbatibilidad en tierra batida esta temporada, para conseguir su tercer trofeo consecutivo tras lograr sus ‘décimos’ Montecarlo y Barcelona.
En la capital catalana se habían enfrentado por última vez Thiem y Nadal hace dos semanas, aunque en esa ocasión, el español logró imponerse más fácilmente al austriaco con un 6-4, 6-1. En cambio, el español tuvo que emplearse a fondo para llevarse su quinto Masters 1000 madrileño, tras los que había ganado en 2005, 2012, 2013 y 2014.
El español logró además igualar la marca de 30 Masters 1000 de Novak Djokovic, al que Nadal había superado en semifinales el sábado. “Fue un partido emocionante”, dijo Nadal a pie de pista, reconociendo que “estaba un poquito nervioso, me costaba mover la pelota, pero al final del primer set y en el segundo elevamos el nivel”.
Le costó a Nadal entrar en el partido en los primeros minutos, varios errores e imprecisiones permitieron a Thiem romperle el servicio en el tercer juego para ponerse 2-1.
El español devolvería la rotura en el sexto juego para poner las cosas en su sitio, pero con 5-4 en el marcador a su favor el manacorí desperdició tres bolas de break, que le hubieran permitido llevarse el set. La igualada se mantuvo en el marcador llevando la manga al tie break, donde Nadal sufrió ante la potencia del austriaco para ganar 10-8 en la muerte súbita y llevarse el set.
En la segunda manga, Nadal dio un acelerón, comenzó rompiendo el servicio y consolidó su saque 2-0. Después de eso, le bastó al manacorí con mantener su saque para plantarse con un 5-3 a favor. En el noveno juego, Nadal desperdició dos bolas de break, que hubieran supuesto el partido, teniendo que esperar al siguiente para llevarse el título con su servicio.