Todos sabemos que el sexto sentido es sinónimo de intuición.
Las hermanas Lily y Lana Wachowski decidieron inspirarse en sensaciones peculiares para llevarlas a su máxima expresión en la trama de la serie de ciencia ficción Sense 8, que comenzó en 2015 y pondrá fin a su historia hoy, por Netflix, en un capítulo de dos horas.
La serie cuenta la historia de ocho personajes de distintos sexos, credos, nacionalidades y culturas que mediante una extraña capacidad logran conectarse con el resto del clan.
El show tuvo un buen comienzo por lo que renovó su plantilla para una segunda temporada. Sin embargo, la historia terminaría allí debido a los altos costos de producción. Por eso, en junio de 2017 se canceló la serie. Se cree que cada episodio rondaba los 9 millones de dólares.
Ante la noticia, miles de seguidores en el mundo convirtieron en tendencia el hashtag #renewsense8 en las redes sociales, lo que llevó a Netflix a desarrollar una última entrega para difundir qué sucedió con el personaje Wolfgang, quien fue capturado por los villanos que quieren eliminar a los “sensates” en el capítulo de cierre de la segunda temporada.
El gran reto que enfrenta el final de la secuela es concluir las historias de cada uno de los personajes de manera coherente.
Para las Wachoski, Sense 8 cambia completamente la narrativa dominante de las series de televisión y del cine actual. “Yo quería hacer un show en el que cualquier persona pudiera ser protagonista, en el que las mujeres fueran fuertes, los hombres sensibles y que no importara la orientación sexual”, dijo Lana Wachowski.
La crítica positiva más recurrente de la serie fue su esfuerzo por mostrar un elenco íntegramente multiétnico, que además fue creando lazos fuertes de amistad y amor entre sí, y dejó como mensaje que la unión y la colaboración entre culturas y credos diferentes es posible si las sociedades se enfocan en conectarse. La comunidad LGTB celebró la manera en la que fue tratada en este show.