La muerte violenta de personas de la tercera edad se incrementó 63%, en los 6 meses que van de año, con respecto a 2017, cuando ocurrieron 499 asesinatos en todo el país. “Quiere decir que han asesinado a un anciano por mes”, afirmó Luis Francisco Cabezas, coordinador general de la Asociación Civil Convite, que procesa los reportes del primer semestre.
En el informe de 2017, Convite señala que los homicidios de estas personas, cuyas edades oscilan entre 60 años y 95 años, representó un aumento de 87% en relación con 2016. De las 499 muertes violentas, 321 fueron homicidios intencionales: 75 hombres y 264 mujeres. “87% de las muertes se produjeron con armas de fuego, y el robo es el móvil con más incidencia”.
El adulto mayor “sigue siendo un blanco de la delincuencia, lo cual demuestra la incapacidad del Estado y sus políticas de seguridad para quienes en determinada edad quedan solos y vulnerables en un país que se enlista como el más peligroso e inseguro de la región”, agregó.
Cabezas indicó que no hay estadísticas que reflejen el número de víctimas en su totalidad; aunado con ello, tampoco hay compromiso para ampliar el eje de acción en materia de investigación criminal, y muchos de los casos quedan impunes. “Esconder las cifras de homicidios contra personas vulnerables deja mucho que decir de un Estado con más de veinte planes de seguridad, sin resultados positivos. Por el contrario, el delito de homicidio sigue en el tope y es, si se quiere, el de moda por los delincuentes, que prefieren asesinar porque el artículo 405 del Código Penal le atribuye una condena no mayor a 18 años”, explicó.
Víctimas del sistema. El 8 de enero pasado, medios nacionales reseñaron el homicidio de José Antonio López, de 87 años de edad, que murió a golpes, registrado en el geriátrico Galipán, parroquia El Paraíso. “Familiares fueron los que apresuraron las investigaciones porque la salud del abuelo empeoró considerablemente mientras estuvo recluido en un centro donde se supone que velarían por su bienestar. Finalmente se determinó que había recibido golpizas de forma consecuente”, dijo.
Cabezas informó que desde la organización que preside han hecho exhortos al Ministerio Público para profundizar los detalles en las investigaciones de otros cuatro casos que a la fecha no han sido resueltos.
“Entre ellos destaca el de una pareja de mujeres asesinadas con arma blanca en el municipio Palo Negro, estado Aragua. Las víctimas eran Cruz Beltrán, de 75 años, y Carmen Ernesta Quijano, de 62 años. Ambas sufrieron múltiples heridas con arma blanca, y para el momento la policía de la región solo indicó que no descartaban el robo como móvil del hecho”, recordó Cabezas.
Los demás casos que la ONG Convite pide ampliar son los de Gervacio Rivas Blanco, de 71 años, ocurrido en el sector Vizcaíno de Santa Teresa del Tuy, estado Miranda “a quien se presume hayan asesinado brutalmente a cuchilladas por una supuesta venganza, homicidio registrado en febrero. Otro fue el de un caletero que trabajaba en el terminal de pasajeros de Valencia, de nombre Chaarani Bahgat, de 68 años, a quien le dispararon para robarlo. El hecho ocurrió en marzo pasado y, por último, el de Arnoldo Elejalde Gavilán, a quien mataron a golpes y puñaladas luego de cobrar la pensión en una agencia bancaria de la avenida Los Próceres, estado Mérida. Al abuelo lo dejaron tendido en la calle. El hecho sucedió en abril”, refirió Cabezas.
“No hay compromiso en ampliar el eje de acción en materia de investigación criminal y muchos de los casos quedan impunes”
Luis Francisco Cabezas, coordinador general de la Asociación Civil Convite.
Radiografía en cifras.
De un total de 321 homicidios de ancianos registrados el año pasado, 109 fueron por arma de fuego, 88 por arma blanca, 30 por objetos contundentes, 14 por golpizas, 38 por asfixia mecánica, 5 por fuego provocado, y el resto por determinar. En 63% de los casos utilizaron armas de fuego durante robos. 54% de las víctimas tienen entre 60 años y 70 años, 2 de cada 3 tienen entre 60 años y 64 años. Aragua se eleva al tercer lugar en homicidios de personas de la tercera edad, superado aún por Zulia, Distrito Capital y Miranda.