Joaquín Navarro, de 16 años de edad, murió en el Hospital de El Llanito el martes a las 2:37 am, a causa del tiro que recibió en el abdomen cuando dormía en su residencia el sábado pasado en la madrugada, en el sector Brisas de Charallave en el estado Miranda.Dos bandas dirimían sus diferencias con disparos y uno de esos proyectiles alcanzó al muchacho mientras dormía. El adolescente estudiaba tercer año en el liceo Andrés Eloy Blanco ubicado en la zona. El proyectil que le quitó la vida entró por una ventana.Eduardo Rivero, tío de la víctima, explicó que los tiroteos en el sector son frecuentes y que la gente clama por seguridad. Cree que es necesario ponerle un parado al hampa. ?Si las bandas tienen diferencias que se maten entre ellos, pero no a gente inocente?, expresó.Con la muerte de Navarro asciende a 58 el número de niños y adolescentes ultimados este año en la Gran Caracas.Reymer Quiroz, de 22 años de edad, salió de su domicilio ubicado en la calle Emiliano Hernández de Los Magallanes de Catia el martes a las 3:00 pm. Pidió una moto prestada para ir a comprar leche a su bebé de 8 meses de nacido. Cuando se desplazaba por la calle La Unidad de esa zona le dispararon y lo despojaron de la moto color negro. Trabajaba como ayudante de electricidad en el Metro de Caracas. Iba a ser transferido a la Línea 5 de ese sistema.Un vecino llamó a un hermano de Quiroz para avisarle que lo habían llevado al hospital del sector porque lo habían herido.Era padre de otro niño de 3 años de edad y el segundo de cuatro hermanos.


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