El supervisor agregado de la Policía Nacional Bolivariana, Julio Ilarraza, adscrito a las Fuerzas de Acciones Especiales, fue ultimado de cuatro tiros al enfrentarse con delincuentes en la esquina de Cola de Pato, parroquia La Pastora, el martes en la tarde. En el intercambio de disparos, un compañero de la víctima resultó herido. Ilarraza fue trasladado al Hospital de Lídice donde pereció. Los dos funcionarios habían ido a esa zona a comprar un repuesto.
Una hora después del suceso, comisiones de la FAES iniciaron un amplio operativo en esa parroquia, con el fin de capturar al homicida del supervisor agregado, que fue identificado como José Alejandro Márquez, apodado Musulungo, que le robó el arma de reglamento a Ilarraza.
Luego de la pesquisa, ubicaron la residencia del homicida, casa número 90 entre las esquinas de Gloria y San Fernando, en La Pastora. Cuando Márquez observó la presencia policial abrió fuego y se originó el intercambio de disparos en el que Musulungo utilizó la pistola del supervisor agregado y en el tiroteo resultó herido.
Los funcionarios policiales lo trasladaron al Hospital Vargas, parroquia San José, donde murió. Le incautaron la pistola Glock, modelo 17, calibre 9 milímetros que perteneció a Ilarraza.