Por mediar en una pelea callejera entre dos mujeres, Luis Enrique Medina, de 20 años de edad, recibió seis tiros: dos en la columna y los demás en la cabeza, pecho y abdomen.
El suceso se registró el viernes a las 6:00 pm frente al hospital Ana Francisca Pérez de León II, en Petare, zona abarrotada de comerciantes informales, custodiada además por un módulo de la policía del municipio Sucre.
Dos mujeres comenzaron una riña en la que ninguno de los presentes quiso intervenir. Medina, que vendía cigarrillos en un puesto cercano a la estación del Metro, se unió a los vecinos y decidió espontáneamente interponerse como mediador en la disputa, pero la buena acción fue mal recompensada con un tubazo en la cabeza que lo dejó casi inconsciente. El agresor fue señalado como pareja de una de las mujeres que se peleaban.
Testigos del hecho afirmaron que cuando Medina intervino para separarlas, su victimario pensó que estaba a favor de la otra contrincante y por eso arremetió contra el joven sin mediar palabras, situación que generó un segundo conflicto de calle, pero entre hombres.
Medina se levantó, tomó el tubo con el que fue agredido y se balanceó contra su oponente –cuya identidad no fue revelada– y lo golpeó de la misma forma. “Ese hombre se apartó del lugar y pensamos que todo terminaría allí y no fue así, porque buscó su arma de fuego y le disparó a mi sobrino en seis ocasiones”, dijo un pariente, sin querer identificarse.
Conocidos cruzaron la calle con el herido en brazos para llevarlo al centro asistencial de la zona, pero ya Medina iba sin signos vitales.
Sus familiares identificaron a su agresor como presunto integrante del colectivo “Sombra”, sin embargo señalaron que no denunciarán ante las autoridades por temor a venganzas contra el resto de la familia.
Medina tenía dos meses residenciado en la calle Canaima, barrio Cuatricentenario de Petare, municipio Sucre, estado Miranda. Y provenía de El Tigre, estado Anzoátegui.
Otro hecho. A Eduard Pérez Cuica, de 34 años de edad, lo hallaron herido el domingo a las 5:00 pm, tendido en el suelo de la plaza Catia. Su cuerpo presentaba golpes y cortadas producidas por arma blanca.
Vecinos lo trasladaron al hospital Miguel Pérez Carreño, donde lo operaron y murió 12 horas después, dadas las complicaciones generadas por una infección que contrajo en el quirófano.
Zona comercial de Petare
Las áreas con mayor comercio informal son las que rodean la salida del Metro en Petare. Transeúntes afirmaron que no hay presencia policial, por lo que son víctimas de la delincuencia a plena luz del día.
Jhon Jairo Marrero, mototaxista, dijo que el robo de motos y el arrebato de celulares son los delitos más comunes. “Las peleas terminan con disparos al aire, otras veces con la muerte de alguien”, sostuvo. En cuanto a la presencia de presuntos colectivos, añadió: “Suelen controlar el comercio en el sector, desde el alquiler de teléfonos hasta la venta de cualquier mercancía. Ellos deciden a quién le permiten vender en la calle o no”.