De tres tiros en la cabeza y delante de su esposa mataron a Argenis Alexander Castillo Ramos, el sábado 30 de diciembre en una plaza situada frente al urbanismo Arvelo en la avenida San Martín.
Castillo Ramos, de 33 años de edad, trabajaba como reparador de calzados y también desempeñaba varios oficios como herrería, albañilería y cualquier otro tipo de labores de reparaciones domésticas.
A un día de finalizar 2017 Castillo Ramos tenía entre su lista de asuntos pendientes cobrar una deuda por coser y pegar un par de zapatos. Con ese pago honraría algunos compromisos económicos, afirmó ayer su madre María Castillo en las afueras de la morgue de Bello Monte.
El sábado 30 de diciembre llamó varias veces al cliente. Al otro lado del teléfono y durante todo el día la respuesta siempre fue la misma: “no voy a pagarte nada, porque no me da la gana”, relató la madre de Castillo Ramos.
Una última llamada se realizó después de las 6:00 pm para concretar un encuentro entre el cliente y Castillo Ramos. La cita sería a las 9:00 pm, en la plaza del sector. “A las 8:30 pm mi hijo bajó con su esposa, mientras yo lo veía desde la ventana del apartamento. Estaba ahí, sentadito. De pronto, dos hombres encapuchados en una moto se le acercaron. El parrillero sacó un arma de fuego. A la esposa la empujaron y cayó al suelo. Escuché tres tiros que me dejaron sin aliento. Era mi muchacho muerto. Todo por cobrar una deuda que lo tenía molesto”, manifestó Castillo entre llantos.
Los homicidas emprendieron la huída con dirección hacia el centro de la ciudad, mientras que vecinos y parientes de la víctima corrieron al lugar del suceso. Argenis Castillo murió de forma inmediata y su viuda lloraba encima del cadáver.
Trámites. El cuerpo fue trasladado a la medicatura forense de Bello Monte a las 11:00 pm. El levantamiento del hecho quedó a cargo de funcionarios del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, El Paraíso.
La policía investiga si se trata de una muerte por encargo o que la persona que tenía la deuda fue el autor del crimen.
“No sabemos quién era ese cliente. Sin embargo, el Cicpc ha realizado hasta entonces el rastreo satelital de la línea telefónica, de acuerdo con el registro de llamadas que tuvo con mi hijo. Esperamos justicia”, explicó María Castillo.
Argenis Castillo era el menor de cinco hermanos y padre de una niña de 5 años de edad. Su familia es de pocos recursos, por lo que hasta ayer su cuerpo se mantenía en las cavas de la morgue, ya que no han conseguido la donación del ataúd “porque en la alcaldía todavía no han comenzado a trabajar como es debido”, expresó Castillo.
La cifra
36 cadáveres fueron ingresados a la morgue de Bello Monte el domingo 31 de diciembre. Ese día quedaron 14 autopsias pendientes, según información extraoficial.