El barrio Gramovén, en la parroquia Sucre de Catia, fue acordonado el viernes en la madrugada por funcionarios adscritos a las Fuerzas de Acciones Especiales de la Policía Nacional Bolivariana. Los motivos de la toma del sector, según fuentes policiales, era dar con el paradero del cabecilla de una banda identificada como Los Ilustres.

En el operativo resultó muerto Luis Rafael Sánchez, un comerciante de 20 años de edad.

“El parapeto policial no sirvió de nada, no consiguieron ni al presunto líder ni a los integrantes de esa banda. Para completar el operativo, decidieron entrar en mi casa y despertaron a mi hermano que estaba en la cama junto a su esposa y su hija de 1 año de edad. Le dieron varios tiros. Luego lo sacaron envuelto en una sábana para llevarlo al Hospital Ricardo Baquero González, conocido como el Periférico de Catia, pero ya iba muerto. Uno de los policías vestido de negro y con capucha dijo: Esto es lo que hay, y se fue”, relató Luis Abraham Sánchez, hermano mayor de la víctima.

Sánchez agregó que a su segundo hermano se lo llevaron detenido, y encima del sofá los funcionarios colocaron un revólver calibre 38, un pasamontañas negro y un radio transmisor de uso policial. “Luego tomaron fotografías y dijeron que esa era la evidencia incautada”, sostuvo Sánchez.

Agregó también: “Si ellos representan la ley, prefiero creer en los malandros del barrio”.


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