Un total de 2.082 muertes por accidentes de tránsito fue reportado en el país durante el año 2015, mientras que para 2016 esta cifra descendió a 1.836, lo que ubicó la tasa en 6,79 para el año 2015 y 5,99 para el 2016, de personas fallecidas en accidentes viales por cada 100.000 habitantes, según el informe del Observatorio de Seguridad Vial presentado ayer en la mañana en el Auditorio de la Universidad Católica Andrés Bello.

9 de cada 10 siniestros viales, durante 2015-2016, en los que ha habido fallecidos son atribuibles a acciones u omisiones del conductor, y la primera causa señalada es el incumplimiento de las normas, en especial las que regulan los límites de velocidad, según el informe. El documento detalla que durante este período las muertes por accidentes viales se incrementaron en los estados Bolívar, Anzoátegui, Trujillo, Mérida, Sucre, Portuguesa, Cojedes y Vargas, mientras que para el resto de las entidades venezolanas las cifras descendieron en 2016 en relación con el año anterior. Distrito Capital presentó una disminución de 65%, mientras que para el estado Carabobo las muertes bajaron 45%. Esto es atribuible a una considerable disminución del parque automotor producto de la recesión económica, señaló Dayana Betancourt, coordinadora del Observatorio de Seguridad Vial, quien además informó que el estado Miranda tuvo las cifras más elevadas de muertes por accidentes de tráfico en ambos años. Sin embargo, para 2016 se reportó una baja de 19,4%.

En ambos períodos, el estado Cojedes tuvo las tasas más elevadas de mortalidad por accidentes de tráfico del país. Trujillo, que figuró con la cuarta tasa más alta en 2015, pasó al segundo lugar en 2016, mientras que Mérida y Vargas ocuparon el tercero y el cuarto lugar al finalizar 2016.

El estado Zulia, que ocupaba los primeros lugares de las entidades con mayores cifras netas de muertes, pasó al grupo de las tasas más bajas. Estos datos incluyen todas las muertes reportadas de conductores, copilotos, acompañantes o pasajeros, así como también las de peatones o transeúntes que habrían perdido la vida en forma inmediata al verse impactados en tales hechos.


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