Una mujer le quemó las manos a sus tres hijos por utilizar dos kilos de harina de maíz para jugar carritos, indicó Luis Vivas, presidente del Consejo de Protección de Carabobo. Así lo reseñó el diario El Carabobeño. «Ellos rompieron los empaques para jugar con el producto. Su madre había pasado 10 horas en la cola para comprarlos», precisó el funcionario. Vecinos del sector denunciaron a la mujer ante las autoridades luego de escuchar los gritos de los niños. «Les pidió que se levantaran y extendieran sus manos mientras ella calentaba una cuchara en la cocina. Les colocó la cuchara en cada palma de la mano», añadió. La mujer fue detenida por funcionarios policiales. Los niños fueron llevados centro asistencial donde indicaron que eran quemaduras leves. Posteriormente fueron trasladados a un hogar sustituto.
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