“Le destrozaron la cara”, gritaron moradores y curiosos que se acercaron a detallar el cadáver de un hombre a quien luego identificaron como Víctor José Fernández Rodríguez, un mecánico que residía en el sector Las Torres en la parroquia Antímano, donde ocurrió el suceso el domingo a las 5:00 pm.

Las detonaciones de un arma de fuego paralizaron a los residentes, mientras que otros corrieron para resguardar sus vidas, relataron testigos a familiares de Fernández Rodríguez a quien luego cubrieron con una sábana mientras esperaban a los funcionarios del organismo detectivesco adscritos al Eje de Homicidios, subdelegación Noroeste, que hicieron el levantamiento del cuerpo una hora después.

El suceso. El domingo en la mañana, Fernández Rodríguez, de 23 años de edad, salió de su casa para visitar a una tía en los urbanismos de Fuerte Tiuna. “Decidió irse en su carro, un Ford K color gris, año 2004 que había comprado dos semanas atrás”, dijo su madre Lisbeth Rodríguez.

A las 4:00 pm, Fernández llamó a su casa para avisar sobre su llegada. Ya en el barrio, testigos vieron cuando seis hombres se le acercaron y lo apuntaron con un arma. “Lo bajaron del carro y le dispararon varias veces y luego hicieron ráfagas de tiros al aire que hicieron correr a más de uno. Le quitaron el carro, además de 100 dólares y su teléfono celular. Eso fue lo que nos dijeron los pocos que se atrevieron a hablar en medio de la conmoción”, relató la madre en la morgue de Bello Monte, mientras tramitaba los documentos para retirar el cuerpo del mayor de sus cuatro hijos, que velarán a féretro cerrado.

Víctor José Fernández Rodríguez trabajaba mecánica de forma independiente. Tenía previsto migrar a Colombia. Era padre de dos hijos: una hembra de 1 año de edad y un varón de 10 meses.

Fuentes policiales indicaron que no descartan la venganza o ajuste de cuentas como segundo móvil. “Si lo iban a robar no le dan tantos tiros. Esto es señal de una venganza planificada; que todos lo vieran”, dijo el informante.

Otro hecho similar ocurrió a las 12:00 del mediodía en el barrio San Blas en Petare. Se trata de Joel López Julio, de 25 años de edad, un obrero de construcción a quien asesinaron de un tiro en la cara a pocos pasos de la entrada de su casa. “Cuando lo vieron muerto en el suelo, los malandros le dispararon en las piernas”, dijo Plinio López, tío de la víctima.

Ese día, más temprano, Joel López había salido a realizar varias compras en la redoma de Petare. De regreso a su casa, fue atacado por tres hombres que le robaron dos teléfonos celulares, únicas pertenencias de valor que llevaba consigo.

Joel López trabajaba de forma eventual como obrero de construcción, con su padre y dos tíos a quienes no identificaron. Era el mayor de tres hermanos.


Polisucre, sin resultados

La Dirección de la Policía del municipio Sucre, a cargo del comisario jefe Omar Márquez, no ha emitido cifras en cuanto a disminución o incremento de delitos más recurrentes, como lo ha hecho el resto de las policías municipales. Fuentes cercanas indicaron que fue en enero de este año, cuando asumió la Dirección de ese cuerpo policial. “Su única aparición en público fue el 16 julio, Día del Policía, cuando junto con el alcalde  José Vicente Rangel Ávalos ascendió a 165 funcionarios a la jerarquía inmediatamente superior”, dijo una fuente.



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