Los familiares de Luis Alberto Henríquez Barrios, de 23 años de edad, denunciaron que este fue ultimado de varios disparos a las 9:00 pm del viernes pasado por funcionarios de la Fuerza de Acciones Especiales. El primer disparo se lo dieron en el sector Las Cruz de Gramoven, Catia, parroquia Sucre.
Henríquez Barrios se desplazaba en su auto Neón, color negro, a esa hora cuando regresaba de la casa de su mamá. El vehículo fue interceptado por otro, Chery rojo, placas AG22L4A, tripulado por funcionarios de la FAES que lo bajaron de su carro y le dieron un disparo en el pecho.
Luego lo hicieron subir al Chery rojo, lo ruletearon por diferentes sectores para regresar al sector La Cruz, en una patrulla, lo bajaron de ese vehículo y le dieron otro disparo.
Los parientes indicaron que a Henríquez los policías lo asfixiaron al introducirle una camisa en la boca. Luego el cadáver fue ingresado al Hospital de Los Magallanes de Catia, refirió uno de los parientes.
Un sobrino de la víctima, de 11 años de edad, pudo observar cuando a su tío le dieron en primer disparo.
Hasta hace un año Henríquez laboró en la empresa Nestlé de Los Cortijos, municipio Sucre, estado Miranda, y actualmente hacía trámites para ingresar en la Universidad Nacional Experimental de la Seguridad porque aspiraba a ser funcionario de la policía científica. Era el menor de 6 hermanos. No dejó hijos.
Los parientes indicaron que este caso se trató de una simulación de enfrentamiento. La víctima nunca estuvo preso ni estaba solicitado por tribunales u organismos de seguridad.