Desde octubre hasta la segunda semana de noviembre fueron ingresados en la morgue de Bello Monte, la principal de Caracas, al menos 110 cadáveres por muerte violenta, según información extraoficial. En esta categoría se incluyen los homicidios por armas de fuego, objetos contundentes o armas blancas.
Para los médicos forenses, este tipo de víctimas representa un número más. Sin embargo, hay un complejo protocolo que deben seguir en la institución y un código, el número 62, que identifica a quienes murieron en un enfrentamiento con policías. “Esos que pierden la vida en un intercambio de disparos”, precisan funcionarios del Cicpc. Al ser trasladado el cadáver a la morgue se inicia el proceso que padecen por igual trabajadores de esa dependencia y parientes que ignoran los trámites que se deben cumplir.
Los nombres y apellidos de la víctima s escriben en un libro de ingresos diarios, pero si al momento de los hechos la persona estaba sin documentos, se registra el ingreso del cuerpo y se espera por el reconocimiento familiar.
Código 62. Al cadáver se le coloca el número 62 y a un lado del cartón rotulado se indica si murió en un enfrentamiento con uniformados del Cicpc, de la PNB o de cualquier otro organismo de seguridad. Mientras tanto, afuera de la morgue el familiar inicia los trámites: suministra en una planilla datos del fallecido como fecha de nacimiento, edad y dirección, toda información necesaria para el acta de defunción.
En ocasiones el pariente cree que el trámite culmina allí, pero es el momento en que comienzan a transcurrir horas y horas entre reclamos, disgustos, insultos a los funcionarios, gritos y exigencia de atención.
En las salas de la morgue se verifica si el cuerpo ya identificado con el número 62 corresponde a una persona que estaba solicitada, si había estado vinculada con hechos delictivos y si además tenía ingresos a tribunales penales. En caso afirmativo se requiere la presencia de funcionarios del Ministerio Público y de los tribunales.
“Si esa persona en algún momento agredió a otra y la causa consta en un expediente judicial, se requiere que se confirme delante de los fiscales si en efecto el muerto es el victimario. La presencia de los funcionarios del Ministerio Público es necesaria para dar por terminada la causa que reposa en el expediente de ese presunto delincuente.
Una vez que el Eje de Homicidios del Cicpc notifica la muerte de esa persona, los tribunales y la Fiscalía no deben demorar más de tres días para hacer el debido reconocimiento y que se pueda emitir la orden de entrega del cuerpo, pues de lo contrario la morgue se convierte en un depósito de cadáveres, expresa la fuente.
Penosa y larga espera. Con el dolor que representa la pérdida de un ser querido, familiares deambulan de un lado a otro por la morgue de Bello Monte. Respiran hondo después de cada sorbo de café. Nadie les ha dicho que la entrega del cuerpo puede demorarse hasta cinco días porque su familiar lleva el mencionado código.
La espera, insiste la fuente, no depende del Servicio Nacional de Medicina y Ciencias Forenses, sino de los fiscales del Ministerio Público que tardan en llegar. “No se hacen presentes en el momento que se les requiere”.
Otra situación que muchas veces complica los trámites es que los parientes no tienen conocimiento del verdadero número de cédula de identidad del fallecido. “Hemos tenido casos en los que el nombre y apellido del muerto sí coinciden con la partida de nacimiento, pero el número de cédula de identidad corresponde a otra persona, según el sistema del Consejo Nacional Electoral. Se trata de una cédula montada. Esto hace necesaria la verificación de la identidad de esa otra persona, saber si está vinculada de alguna forma a la víctima o si ha cometido algún delito”, detalla.
En la morgue de Bello Monte funciona una oficina del Servicio Administrativo de Identificación, Migración y Extranjería, donde se les brinda asesoría a los parientes cuando se presentan casos de usurpación de identidad.
El funcionario agrega que también existe el departamento de atención al público, donde tramitan donaciones de parcelas y ataúdes. “El Ministerio de Interior, Justicia y Paz cancela las parcelas en el Cementerio General del Sur, mientras que el Senamecf dona los féretros. También hay un servicio de cremación gratuita habilitada en el camposanto. “A estas familias se les denomina ‘pobres de solemnidad”, dice.
Para tomar en cuenta. Quien retira el cadáver de la morgue debe llevar la copia de la cédula de identidad de la persona fallecida y la suya. También copia de la partida de nacimiento y del acta de unión estable de hecho o de matrimonio. Es importante que recuerde si su familiar tenía alguna marca, cicatriz o tatuaje por el que se le pueda reconocer en caso de que el cuerpo se encuentre en estado de descomposición.
El formulario requerido para solicitar el acta de defunción debe ser llenado con datos precisos y exactos. No debe contener enmiendas ni tachaduras. Funcionarios del Senamecf sugieren su revisión en varias ocasiones, firmar y entregar cuando exista la certeza de que los datos y demás detalles suministrados son los correctos. En caso de equivocaciones, el sistema del CNE solo permite rectificarlos en un lapso no mayor a 48 horas.
1.- Pasos que requiere la necropsia de ley (autopsia)
La reseña decadactilar post mortem está sujeta al estado de las falanges del cadáver. Es la labor más importante durante el examen para lograr la identificación del cuerpo.
La fotografía forense capta la fisonomía de la persona, detalles que puedan servir más adelante, en caso de que los familiares se demoren en reclamar el cuerpo, bien sea porque no se hayan enterado de la muerte o porque no tengan los recursos económicos para efectuar el sepelio y otros gastos fúnebres.
Se toman fotos de las heridas para resguardar las evidencias: proyectiles incrustados en el cuerpo, pedazos de vidrio u objetos punzopenetrantes que hayan causado la muerte.
2.- Procedimientos no rutinarios
Se realizan cuando el cadáver se encuentra en avanzado estado de descomposición:
–Registro odontológico del paciente a través de una radiografía panorámica.
–Estudios de antropología: determina el estudio del sistema esquelético: medidas, proporciones de los huesos y geometría facial.
–Estudios de genética: permiten determinar el ADN.