Investigadores del Cicpc esperan detener en las próximas horas al motorizado que asaltó y mató a la joven Vanessa Tomasini Martínez mientras hablaba por celular con su madre, en el banco de una plaza en la calle Pedro Emilio Coll en Santa Mónica.

Se informó que el hecho fue captado por cámaras de seguridad de negocios adyacentes al local del Instituto de Artes Culinarias, donde Tomasini trabajaba como ayudante de cocina.

Familiares de Vanessa Tomasini recibieron el sábado en la morgue de Bello Monte el cadáver que sería trasladado a la ciudad de Maracay, de donde la joven era oriunda, para darle sepultura. Allí narraron detalles del hecho que conmocionó a vecinos del sector.

Tomasini, quien había dado a luz una niña hace nueve meses, se encontraba el viernes a las 8:00 am sentada en la plaza del sector esperando a que abrieran el instituto. Hablaba por el celular cuando un motorizado la observó y después de recorrer varios metros se devolvió para quietarle el teléfono inteligente. El delincuente se sentó al lado de la mujer para asaltarla y forcejearon. Tomasini introdujo el teléfono en su cartera y recibió una cuchillada en el pecho. Su madre, que escuchaba todo el incidente, oyó cuando dijo: “Me cortaron”, y cayó.

El motorizado huyó con la cartera de la joven, pero fue perseguido por un vigilante que comenzó a pedir auxilio a gritos, por lo que el delincuente la lanzó con el celular.

Historia de horror en Pan de Azúcar. Con la muerte de Vanessa Tomasini Martínez aumentó a 50 el número de mujeres asesinadas en lo que va de año. Rosa Constanza Arveláiz Reyes, de 70 años de edad, asesinada por 3 jóvenes vecinos hace semana y media, fue la número 49 en la lista de muertes violentas de mujeres.

A principios de la semana pasada, funcionarios de la División de Extorsión y Secuestros que operan en el estado Miranda, luego de una cuidadosa pesquisa, localizaron el cadáver de Aveláiz Reyes, quien había sido secuestrada varios días antes por cuatro hombres en la urbanización Pan de Azúcar, en Colinas de Carrizal en el estado Miranda.

El cuerpo fue hallado dentro de una tanquilla de aguas negras cerca de la vivienda ubicada frente a la casa de la víctima, la cual ocupaban dos de los secuestradores y que frecuentaba un amigo.

Arveláiz Reyes, que llevaba cuatro años viviendo sola, fue abordada por los tres hombres, todos entre un promedio de 20 años de edad, y se la llevaron de su casa en el automóvil de su propiedad, de acuerdo con los reportes policiales y de vecinos del sector. Sabían que sus familiares estaban en el exterior y que recibía dinero en moneda extranjera para sus gastos.

La denuncia de la desaparición de la mujer fue hecha por una sobrina, luego del reporte de vecinos de que algo extraño le había ocurrido. Al ser notificados, los investigadores iniciaron la pesquisa y esa misma noche localizaron el vehículo a dos cuadras de la casa de la víctima. Luego detectaron que sus tarjetas de crédito habían sido empleadas en varios locales cercanos por los hombres, y con ayuda de los videos y de la colaboración de vecinos lograron identificar a los delincuentes. Algo que llamó la atención de los funcionarios antisecuestros del Cicpc es que no hubo solicitud de rescate.

Luego de determinar que tres de los cuatro plagiarios eran los vecinos de Arveláiz Reyes, a quienes habitantes del sector habían visto, fueron detenidos en la casa que ocupaban, que estaba semiabandonada. Allí dos de ellos revelaron el lugar donde habían liberado el cuerpo, de acuerdo con la información extraoficial.

El viernes, los vecinos César Gil, de 24 años de edad, Charlei Romero, de 22 años de edad, junto con Germán Roth, de 20 años de edad, y el amigo de estos, Miguel Fereda, de 34 años de edad, dueño de la camioneta en la que pretendían huir y residente del sector Brisas de Oriente, fueron privados de libertad por el Tribunal 3° de Control del estado Miranda.


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