A Xiomar José Zuniaga Gaspar, de 32 años de edad, le dieron 7 disparos entre pecho y estómago ayer a las 12:15 am en la parroquia La Vega, entrada del barrio Las Amapolas cuando estaba en una fiesta callejera, conocida como sounds cars. Su esposa, Doremilis González, que también estaba en la reunión, contó que la Policía Nacional Bolivariana había ordenado apagar la música y desalojar la vía pública. Minutos después aparecieron unos hombres encapuchados que dispararon a los presentes. González indicó que los uniformados se fueron del lugar cuando llegaron los pistoleros.
En el mismo hecho Orangel Simancas Sanz, de 25 años de edad, recibió impactos de bala en la cabeza. Ambas víctimas fueron auxiliadas por la esposa de Zuniaga Gaspar, quien los trasladó en moto al Hospital Pérez Carreño; sin embargo, fallecieron minutos después de su ingreso.
Carolina Sanz, madre de Simancas, agregó que cuando escuchó las detonaciones le escribió un mensaje de texto a su hijo, pero no recibió respuesta. Entonces decidió salir a buscarlo y en el trayecto se encontró a dos amigas del joven que le informaron sobre lo ocurrido, e inmediatamente se trasladó al centro asistencial. Simancas era comerciante informal, se dedicaba a vender ropa y perfumes junto con su mamá en La Vega. Deja a su esposa embarazada y a un bebé de dos años de edad. Trascendió que había otra persona fallecida en el Pérez Carreño a quien también le dispararon en la fiesta callejera, pero se desconoce su identidad.
Zuniaga Gaspar era barbero y trabajaba en el sector Ruiz Pineda. La hermana, que pidió resguardar su identidad, indicó que el 13 de mayo su padre, José Zuniaga, de 53 años de edad, cumplirá dos años de muerto. Era taxista y lo asesinaron de un disparo en la cabeza en San Félix, estado Bolívar. Encontraron su cadáver dentro del vehículo. A los parientes les dijeron que fue para robarlo, pero opuso resistencia.
Conforme a lo que le informaron a los familiares de ambas víctimas, los cuerpos fueron trasladados a la medicatura forense a las 5:00 am y hasta las 9:30 am de ayer habían ingresado 12 cadáveres a la Morgue de Bello Monte.
Las llamadas sounds cars se han hecho populares entre la gente joven, que se reúnen en plena vía pública a beber y escuchar música en sus vehículos. Pero ambas familias admitieron que en estas reuniones suele haber problemas por la alta ingesta de alcohol.