José Alí Díaz, de 51 años de edad, murió desangrado cuando un hombre le hizo varias heridas en el cuello con el pico de una botella. El suceso se registró el sábado a la 1:00 am en la redoma de Las Adjuntas en la parroquia Macarao.

Díaz trabajaba por su cuenta como mecánico. Temprano había reparado un vehículo, luego compró una botella de licor que compartió con varios amigos hasta altas horas de la noche. Cuando los acompañantes se retiraron se quedó dormido.

En el sitio se presentó una pareja y el hombre intentó quitarle la botella que tenía a su lado; el mecánico se despertó y trató de impedir que lo despojaran del licor, pero finalmente el individuo se la arrebató, la rompió y con el pico lo hirió varias veces en el cuello. Díaz murió desangrado al no recibir auxilio. Estaba domiciliado en la urbanización Kennedy en Macarao. No dejó descendencia.

El cadáver del mecánico fue trasladado a la morgue de Bello Monte para practicarle la autopsia e identificarlo mediante la necrodactilia. Una comisión de funcionarios del Eje Noroeste de la División contra Homicidios del Cicpc asumió las pesquisas para identificar y capturar al autor de ese hecho. Los investigadores realizarán un recorrido en la zona en busca de testigos que pudieron haber visto el suceso y de cámaras de seguridad que hubieran grabado al homicida.


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