Presos
Una banda robaba fincas para extraer ganado | Foto: Cortesía

El alcalde de Chacao, Ramón Muchacho, respondió a señalamientos realizados por el funcionarios del gobierno sobre una supuesta inacción de la policía ante hechos violentos ocurridos en el municipio el miércoles 19, en la tarde.

Refirió que ese día, luego de culminar la marcha opositora, que finalizó con acciones represivas por parte de los cuerpos de seguridad, un grupo de hombres identificados como supuestos estudiantes causó destrozos en instalaciones oficiales ubicadas en el municipio Chacao. En la Base Área Generalísimo Francisco de Miranda fueron reportados daños, ya que tumbaron una de las rejas; en la sede de Polichacao destrozaron el cercado perimetral y varios vehículos, así como en la sede del INAC, en Altamira, y la sede de la Sundee, en El Bosque.

Muchacho recordó que Polichacao permanece intervenido por la PNB, bajo la dirección de Gustavo Olave. “Si tienen alguna acusación que hacer, que vayan al Ministerio de Justicia porque Polichacao está intervenida; además, no es una policía antimotín pues eso le compete a la Guardia Nacional Bolivariana y a la Policía Nacional Bolivariana. Ningún agente puede reprimir una marcha con un arma de fuego, eso viola leyes internacionales”, afirmó.

Rechazó los ataques de “los grupos facinerosos”. Destacó que la policía municipal cuenta con 400 integrantes que están las 24 horas trabajando en el marco del Operativo Preventivo de Seguridad. “Nuestros funcionarios, entre policías y Salud Chacao, no han dormido porque están trabajando para el bien de nuestros vecinos”, dijo.

El jefe del Sundee, William Contreras, había informado más temprano que a 50 metros de la sede del organismo gubernamental, ubicado en El Bosque, hay personas que causaron daños al edificio y además robaron equipos de oficina. Culpó al alcalde de los ataques, debido a que ocurrieron en su jurisdicción.

Muchacho también informó que en Salud Chacao se atendieron 60 personas heridas y lesionadas, todas dadas de alta excepto un menor de 16 años de edad, que recibió un golpe de una bomba lacrimógena a la altura del ojo derecho y tuvo que ser trasladado a la Clínica Sanatrix y posteriormente al hospital Domingo Luciani para ser intervenido quirúrgicamente.


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