Líderes vecinales de distintas parroquias de Caracas realizaron una protesta creativa en la entrada del puente Los Leones de El Paraíso, en defensa de los símbolos históricos de la capital.
Deploraron que la alcaldesa de la ciudad, Érika Farías, sustituyera la estatua del león, que estaba ubicada en la entrada de Caracas, para colocar la de la indígena Apacuana, ya que la medida es ilegal y viola la Ordenanza de símbolos municipales de Libertador, que data de 1993 y está vigente, en la que se decreta que el felino forma parte del escudo de armas caraqueño.
“En la ley se certifica que el escudo de armas incluye al león como ícono capitalino. Su retiro es una forma de pisotear la historia de nuestra ciudad a casi 500 años de su fundación”, indicó Carlos Julio Rojas, coordinador del Frente en Defensa del Norte de Caracas.
Señaló que la medida de Farías es un abuso. “Con todo el respeto que merece la guerrera, esta indígena no es de aquí; ella hizo vida en los Valles del Tuy, de allí que ponerla como imagen de la capital es un exabrupto histórico”, expresó.
Rojas informó que iniciarán una campaña comunicacional en defensa del león, ya que el gobierno no podrá borrar siglos de historia: “Desde el amor que sentimos por nuestros Leones del Caracas hasta el orgullo inmenso que tenemos por ser caraqueños, no permitiremos que nos roben nuestros símbolos. En las próximas semanas acudiremos a los tribunales para solicitar una medida cautelar en protección del escudo”.
José Gregorio Ochoa, presidente de la Fundación por la Defensa de Antímano, afirmó que pretenden borrar la memoria urbana al tratar de crear una cultura de resignación para obligar a la sociedad a adaptarse a un sistema doctrinario que el gobierno se empeña en imponer a través de nuevas simbologías. “Vamos a defender nuestra identidad ante las instancias jurisdiccionales correspondientes”, enfatizó.
Cambios
“Apacuana resguarda la entrada hacia nuestra Caracas insurgente. Reivindicamos la obra de una gran guerrera que en el siglo XVI se resistió a la colonización de estas tierras. Con la fuerza de nuestra historia seguiremos resistiendo ante la cultura colonial que se niega a morir”, escribió la alcaldesa por Twitter.
Y añadió: “Indígena, madre, curandera, cacica de la etnia quiriquire, impulsora de la resistencia contra la colonización española del siglo XVI. Su legado sacude la historia patriarcal de Occidente, avivando el espíritu de rebeldía de todas nuestras generaciones”.
La estatua de Apacuana, de 7 metros de altura y 1.200 kilos de peso, muestra a la heroína indígena de pie, sosteniendo una lanza con las 2 manos, a la entrada de la autopista Francisco Fajardo, por la que se accede a la capital.
El león rugiente, posando sobre una concha marina con una cruz, ha sido símbolo de Caracas desde su fundación en el año 1567. El destino de esta obra del escultor Clemente Díaz aún se desconoce.
El cambio abrió una polémica en las redes sociales. “Gastarse esa plata cuando Caracas tiene tantas carencias”, criticó un usuario por Twitter, refiriéndose a la grave crisis económica que ha disparado la pobreza en Venezuela.
“Yo hago una propuesta: en vez de poner a Apacuana pongamos a Luis Almagro o a Donald Trump. ¿Qué les parece? Idiotas, el león es de África”, escribió otro tuitero que apoyó la medida.
No faltaron quienes recordaron que la instalación de la estatua coincidió con la muerte de un indígena pemón en Canaima, durante un operativo militar contra la minería ilegal.