Un grupo de venezolanos en Ecuador piden dinero en las calles de Guayaquil para poder enterrar a un joven proveniente de Venezuela, quien murió electrocutado el pasado jueves.
Pedro Pérez, quien se desempañaba como obrero, se encontraba pintando una casa al norte de la ciudad cuando recibió una descarga eléctrica.
«Solo la caja (cofre mortuorio) nos cuesta 300 dólares, estamos buscando un espacio en un cementerio pero no tenemos suficiente dinero, por eso sigue en la morgue», contó María Briceños, compatriota del fallecido.
La comunidad venezolana del sector donde ocurrió el hecho pide la colaboración de los vecinos de las principales calles de Sauces y de Vergeles.
Con información de diario El Universo
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