María Auxiliadora Escobar de Yammine, madre del muchacho arrollado por una tanqueta de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB), rompió el silencio sobre el estado de salud de su hijo. Pedro Yammine fue arrollado dos veces por el vehículo militar, lo que le dejó con daños severos internos y externos.
Escobar recibió una llamada a las 4:45 pm el 3 de mayo de la clínica El Ávila en Caracas. El centro de salud pedía que un familiar de Pedro Yammine fuera de inmediato al lugar, sin ofrecer mayores detalles.
“Colgué el teléfono. Temblaba. No conseguía las llaves. No encontraba cómo ir. Un vecino me llevó. Nos tomó hora y media recorrer dos kilómetros. A Pedro lo llevaron en moto dos hermanos. Tenía siete costillas fracturadas, ambos omóplatos, aire en su cuerpo, fuera de los pulmones y varias cortadas y raspones. Llegó consciente. La enfermera le preguntó qué había almorzado. El respondió: gases lacrimógenos”, relató Escobar en una entrevista al portal Prodavinci.
Pedro Yammine tiene 22 años, se dedica a la fotografía y había asistido a varias protestas de la oposición. “Pedro había estado en la casa media hora antes para buscar agua. Yo le pedí que subiera, que se quedara, pero me dijo que tenía que seguir. La protesta había sido reprimida y desplazada de la autopista Francisco Fajardo hasta Altamira y se fue”.
A pesar de que Escobar llegó a la clínica y recibió el diagnóstico de su hijo, nunca le explicaron lo que había sucedido.
Esa misma noche, su hija confirmó, con la ayuda de un video que circuló en las redes sociales, que el joven atropellado dos veces por la GNB era su hermano Pedro. “No he visto el video, mi esposo tampoco. No podemos”.
“Mi hijo estuvo anestesiado durante dos días. No se movía, tenía los ojos cerrados, estaba hinchado, respiraba conectado a una máquina, y yo le dije: ‘Levántate, fotógrafo, la fotografía te espera’. Lo hice así, sin llorar, porque sé que no le gusta que llore. Él movió los labios, me oyó. Entonces tuve esperanzas de que se salvara”, expresó la madre.
Todavía se encuentra en la terapia intensiva de la clínica, ya no está entubado pero tiene un drenaje en el pulmón izquierdo. Aún desconocen cuándo será dado de alta, pero ya le advirtieron a la familia que necesitará al menos un año de rehabilitación.
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