La crisis económica que atraviesa Venezuela ha alcanzado el mercado de la ortopedia, así lo aseguró Rubén Quiroga, dueño de uno de los laboratorios ortopédicos más reconocidos y con larga trayectoria en el país.
El ortopedista comentó, en una entrevista para El Nacional Web, que actualmente la crisis económica afecta no solo a su empresa y el comercio ortopédico, sino también a los pacientes con amputaciones o con deformidades en el cuerpo, todo esto por los exuberantes costos para la elaboración de las prótesis y férulas.
Los pacientes recurren a estos recintos para la fabricación de prótesis para mejorar su calidad de vida; sin embargo, los precios dificultan la adquisición de estos materiales médicos.
La empresa de Quiroga no solo fabrica para clientes particulares, sino también es distribuidor del Hospital Ortopédico Infantil de Caracas, un recinto que se ha visto afectado por la situación del país: ya que sin materia prima no se pueden enviar los pedidos del centro médico para los niños.
El empresario aseguró que jamás había vivido un momento tan crítico en su carrera. Sin embargo, las puertas de su negocio se mantendrán abiertas, a pesar de los obstáculos y la crisis.
Importaciones “de contrabando”
Muchos de los materiales utilizados por la empresa de Quiroga, para la elaboración de férulas y prótesis, son importados.
Este micro empresario ha tenido que enfrentar importantes trabas para importar la materia prima de Colombia.
“He tenido que ir a Colombia a comprar y traer material, por ejemplo, el plástico copolimero, polipropileno y polietileno que se usa para la realización de férulas. Estos materiales hay que traerlos como si fueran droga o contrabando. Muchas veces tuve que pagar para poderlos pasar a Venezuela”, denunció el empresario.
Descalcificación en niños
Quiroga, quien también fabrica zapatos ortopédicos y corsés para niños, comentó alarmado que la cifra de niños con deformidades en los huesos ha aumentado considerablemente en los últimos meses.
“No sé qué está pasando, creo que es un problema de alimentación pero cada vez llegan más casos de niños con deformidades en la columna y huesos en general. Creo que es algo que debe ser estudiado urgente”, aseguró.
La descalcificación ósea que alerta el especialista tiene varias causas: la principal es una alimentación pobre en calcio y la deficiencia de vitamina D, que es necesaria para la fijación del calcio en los huesos.
Este nuevo patrón de descalcificación ósea puede desencadenar una generación de niños susceptibles a fracturas, con dolores o fragilidad en los huesos.