Hoy la plenaria de la Asamblea Nacional recibirá a la Red de Médicos por la Salud cuyos representantes presentarán a los diputados un proyecto de ley que permita que organismos internacionales envíen a Venezuela la ayuda humanitaria que se requiere para paliar la crisis por escasez de medicamentos e insumos.Gremios, movimiento estudiantil y sindicatos del sector salud avalan la normativa que presionaría y legalizaría la ayuda internacional, debido a que el Ejecutivo no ha activado el mecanismo de cooperación que el gremio de salud, activistas de derechos humanos y parlamentarios han solicitado después de declarar una crisis humanitaria desde el ente legislativo el 26 de enero.El 16 de febrero el diputado José Manuel Olivares, integrante de la subcomisión de Salud de la Asamblea Nacional, junto con Francisco Valencia, presidente de la Coalición de Organizaciones por los Derechos a la Salud y la Vida, acudieron a la Organización Mundial de la Salud, en Washington, para argumentar las razones por las que hay una crisis humanitaria en el país.Solicitaron la incorporación de Venezuela al Fondo Rotatorio-Estratégico de Medicinas, a través del cual se subsidia el precio de fármacos e insumos a la nación que lo integra, pero el gobierno de Venezuela debe pedir la ayuda. De darse esta cooperación, las medicinas llegarían en 20 días.En ese viaje se planteó ante la Organización Panamericana de la Salud traer un equipo técnico para verificar mortalidad materna, proliferación del zika, embarazo precoz, situación hospitalaria e incremento de casos de cáncer, pero aún no se concreta la visita y el Ejecutivo no admite una crisis en el sector salud.La ayuda inmediata solo depende de la aprobación del gobierno venezolano en estos momentos, pero con la normativa se busca otra vía para solucionar el desabastecimiento de medicinas.Olivares resumió que luego de que la subcomisión de Salud de la Asamblea Nacional hizo un diagnóstico en 16 hospitales en Carabobo, Mérida, Vargas, Zulia y Caracas, el primer informe denuncia que 90% de los insumos son comprados por los mismos pacientes, se comparten camas e incubadoras en el caso de las parturientas y recién nacidos y, al menos, 150 biopsias oncológicas están paralizadas por falta de insumos.


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