Un camión que trasladaba la ayuda humanitaria desde Colombia a Venezuela, retrocedió en el puente internacional Simón Bolívar debido a la represión que se generó por parte funcionarios venezolanos en el lugar.
En el puente internacional los miembros de la Polícia Nacional Bolivariana (PNB) y de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) lanzaron perdigones y bombas lacrimógenas.
Tres camiones con ayuda humanitaria fueron incendiados por miembros de la PNB en Ureña. Julio Castro, médico y miembro del equipo técnico de la Comisión Humanitaria, informó que los buses quemados estaban cargados de insulina, morfina, sueros y alimentos.
En la frontera con Colombia se han registrado múltiples heridos por perdigones y lacrimógenas. En Ureña se contabilizan más de 45 heridos.