Ya es sabido las centenares de quejas que han expresado todas aquellos venezolanos que sin más remedio tienen que resignarse a comprar estos productos llamados Clap, ya que de lo contrario a la mayoría de la población se les dificultaría de gran forma poder alimentarse.

Como bien es sabido de total conocimiento público, estos alimentos provenientes del estado son económicos  pero también son de muy mala calidad. Tanto así que algunos productos que integran los denominados Clap ya tienen la mala fama de ocasionar problemas de salud.

Tal es el caso de los productos lácteos contenido en estas cajas de múltiples alimentos. Determinada leche en polvo realmente es un fraude para el consumidor como para la salud. Según investigaciones del portal web ArmandoInfo, dicho producto no alimenta mucho que digamos, realmente es pobre en calcio y proteínas pero repleto de carbohidratos y sodio.

Dependiendo de la marca de leche que se consuma de estos productos subsidiados por el Gobierno, resulta necesario tomar de dos a siete vasos del producto lácteo para conseguir la cantidad de proteínas -7,7 gramos- que normalmente tiene un solo vaso de leche de excelente calidad como aquella que alguna vez llegó a estar al alcance de todos en cualquier supermercado del país.

El requerimiento mínimo de calcio necesario para cada niño de dos a cuatro años son 500 miligramos diarios. Pero con esta leche de mala calidad de los Clap, serían necesarios entre 13 y 41 vasos cada 24 horas, dependiendo del tipo de marca de leche que traiga la caja Clap.

Además de lo baja en nutrientes y proteínas, el consumo de esta leche también ocasiona problemas estomacales como: diarrea, nauseas, dolor de estómago, cólicos, etc. Hay que agregar que determinado producto es elaborado en México y los consumidores han resaltado que el sabor de esta leche es muy salado.

Como dato de suma importancia, nombrada leche mexicana importada para los Clap venezolanos, contiene un análisis químico que incumple con la norma Covenin 1481 y de los parámetros del Instituto Nacional de Nutrición (INN) de Venezuela, así como con la Normal Oficial Mexicana 155-SCFI-2012 para la leche.

En @ReporteYa seleccionamos algunas opiniones de nuestros destacados seguidores:

La usuaria, Libia Gomes @Libiagomes redacta: “#LecheClap Eso es cualquier cosa excepto leche… es una vergüenza comprar productos que ni siquiera se pueden clasificar de mala o baja calidad. ¡Si van a importar algo, por lo menos que sea el producto indicado! Ni para eso pueden servir”.

La cuenta, @agendautomotriz señala: “Es que el objetivo no es beneficiar a nadie con esto, lo que importa realmente es el lucro que ellos obtienen a costa del hambre y la salud del pueblo, de allí que si meten arena en una bolsa de «leche» a ellos le da lo mismo”.

Nuestra seguidora, Maru de Lara @cienfuegosmaru expresa: “#LecheClap ¡Eso no es Leche! Es veneno para el colon. Náuseas y abundante vaciado estomacal para hacer placa de techos a la gran misión. Dolor abdominal de cabeza. En cama 5 días luego de consumir 1/4. Lt”.

La Periodista, Roselli Pisani @roslyp comenta: “#LecheClap ¿Qué tendrá la leche que viene en la caja Clap que enfermó a toda mi familia? Deben investigar qué contiene. Pobres niños que tomen esa leche”.

El Locutor, Luis E. Marval H. @batrax1 comenta: “Puede preguntarle a quienes tienen el negocio. ¿Notaron que ninguno del Gobierno habló de los contenedores con cajas Clap decomisados hace dos semanas en Colombia y declarados como no aptos para consumo humano?  ¿Qué contenían? Silencio”.

Nuestra seguidora, Eama @eama59 escribe: “¿Qué va hacer? La leche esa usted la bate y la deja descansar unas horas y verá en el fondo del envase una cosa que parece cal. Esa leche a más de uno le ha aflojado el estomago”.

Finaliza, Lourdes Fuenmayor @lulifuenmayor dice: “#LecheClap La bebé de una compañera de trabajo tiene una fuerte infección después de haber tomado esa leche”.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!