Una fotografía captó el momento justo en que un funcionario de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) se acercó al equipo del gobernador del estado Miranda, Henrique Capriles Radonski, para disparar perdigones a quemarropa.

La imagen comprueba las claras intenciones de las autoridades de herir a un líder político. Más tarde se conoció que él y su equipo fueron robados por los efectivos.

Capriles fue golpeado con un casco y le dieron un puñetazo en la cara, según informó el Comando Simón Bolívar en su cuenta de Twitter.

Se desconoce cómo se encuentran los miembros del equipo del político opositor.

Antes del robo y de la agresión física, cuerpos de seguridad del Estado lanzaron gas lacrimógeno al gobernador. El equipo de trabajo del dirigente lo auxilió y lo ayudaron a avanzar para salir del área de represión.

El dirigente encabezaba la “Marcha por los caídos”, que pretendía llegar hasta la Defensoría del Pueblo para exigir a Tarek William Saab a que investigue los casos de muertes producto de la represión a las protestas.

Desde la autopista Francisco Fajardo, las autoridades dispararon metras a los manifestantes que se encuentran en Las Mercedes, a la altura del Centro Venezolano Americano (CVA), en la avenida Río de Janeiro.


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