La movilización convocada por la oposición denominada “Gran Marcha por la Salud y la Vida” solo pudo llegar a la autopista Francisco Fajardo y no hasta la sede del Ministerio de Salud en el centro de Caracas como fue planificada debido a la represión de funcionarios de la Policía Nacional Bolivariana (PNB) y la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) con bombas lacrimógenas y «ballenas».

La actividad fue encabezada por médicos, que avanzaron y retrocedieron continuamente por la actuación policial, que tuvo más de dos horas desarrollándose, hasta que se logró hacer retroceder a los manifestantes a la altura de Bello Monte.

José Manuel Olivares, diputado por el estado Vargas, fue agredido en la protesta por funcionarios de la GNB, quienes le lanzaron una bomba lacrimógena a la pierna derecha.

El parlamentario denunció y rechazó la violencia de los funcionarios a través de su cuenta de Twitter: “Así reprime un gobierno cobarde a los médicos. Somos batas contra bombas!! Ya basta de represión”, expresó el diputado.

Varios ciudadanos se lanzaron al río Guaire para escapar de los gases lacrimógenos.


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