El director la ONG, Observatorio Venezolano de Prisiones (OVP), Humberto Prado, denunció que al menos 45 presos políticos se encuentran con falta de recursos dentro del sistema penitenciario.
Prado también recriminó al Estado la falta de atención médica a los privados de libertad. “Al menos 39 presos políticos requieren de medidas humanitarias por el deterioro de su estado de salud», dijo.
La ONG subrayó los casos del diputado Gilber Caro, preso desde enero, quien realizó una huelga de hambre durante nueve días y suspendió por complicaciones de salud.
También el dirigente Carlos Graffe, del partido Voluntad Popular, con cálculos renales. El “delicado” estado de salud en el que se encuentra el alcalde de Barquisimeto, Alfredo Ramos, sufriendo una fuerte crisis hipertensiva.
“El Estado venezolano debe ofrecer respuestas inmediatas, sobre el derecho a la vida de todos los presos, como evidentemente no lo ha hecho. Entonces está incurriendo en la omisión de no garantizar el derecho a la salud de estas personas”, expresó Prado.
El director de la ONG pidió a organismos internacionales que se pronuncien sobre esta situación, de al resto de la población penitenciaria, “en su conjunto están expuestos a enfermedades como tuberculosis, escabiosis, infecciones de transmisión sexual, entre otras”.
Además, exigió a las autoridades acatar 18 boletas de excarcelación, emitidas por varios tribunales desde hace meses y aun no han sido liberados, entre ellos el dirigente opositor Yon Goicoechea, de origen español.