Bony Pertíñez, esposa y abogada del comisario Iván Simonovis, indicó este miércoles que continúa esperando la respuesta de los tribunales, a los que llevaron la denuncia de que a su esposo se le ha negado la atención médica desde hace años, a pesar de su cuadro clínico.
«En los cuatro años que ha estado en casa por cárcel no se le han hecho ni siquiera los exámenes de chequeo que requiere. La respuesta del tribunal ante las solicitudes ha sido absoluto silencio. Temo que sea la misma respuesta si a Iván llega a tener alguna emergencia», dijo Bony para Unión Radio.
Agregó que las restricciones incluso delimitan cuáles son los centros de asistencia médica a los que debe acudir, negándole una atención privada ni la de sus médicos de preferencia. Además, destacó que Simonovis en uno de los presos políticos con más tiempo detenido.
«Le tienen que hacer unos exámenes especiales para determinar si su condición de osteoporosis ha aumentado y en qué grado porque si él se cae, se puede fracturar la cadera y puede formarse un coágulo en sus pulmones. Si en esos casos no recibe asistencia médica, puede morir», explicó.
Pertíñez consideró que la actuación del gobierno en este caso, y con los otros cinco funcionarios que fueron privados de libertad junto a Simonovis se debe a que cualquier medida de libertad demostraría un punto de debilidad por parte del Ejecutivo, acción que no sería de conveniencia para ellos.
Durante sus años de aprehensión, Simonovis estuvo en aislamiento y sin recibir luz solar, lo que afectó su salud. Actualmente, espera que, a falta de respuesta del poder judicial, haya solidaridad.
Con información de Unión Radio