Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea se reunieron en Luxemburgo para tratar la crisis de Venezuela y la repercusión de la migración de venezolanos en los países de la región y, si bien el bloque manifestó que no suavizarán su posición con respecto al país, tampoco abrirán un proceso de diálogo, pero sí buscarán mecanismos de contacto tanto con el gobierno como con la oposición.
Sin embargo, quienes se oponen al gobierno de Nicolás Maduro expresaron, a priori, sus dudas y escepticismo con respecto a la propuesta de la UE, porque hasta ahora han fracasado iniciativas de ese tipo.
La alta representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad, Federica Mogherini, expresó en la reunión que no va a “suavizar la posición sobre Venezuela” y aclaró que no habrá diálogo con el gobierno.
“No hay condiciones para una mediación ni un diálogo en Venezuela, pero vamos a explorar las posibilidades de establecer un grupo de contacto a ver si hay condiciones para facilitar un proceso político para una solución democrática”.
El objetivo sería buscar una manera “de estar en contacto con diferentes partes”, tanto del gobierno del presidente Nicolás Maduro como de la oposición, “al involucrar algunos actores regionales e internacionales”, agregó Mogherini.
La jefa de la diplomacia europea precisó, no obstante, que los cancilleres reafirmaron la “dura posición sobre la crisis política” en el país latinoamericano.
Josep Borrell, canciller español, también aclaró la posición de la UE ante ciertas versiones de que se permutaría el diálogo por las sanciones. Aseguró ayer que ni España ni ningún Estado miembro de la UE han hablado de modificar sanciones en Venezuela, sino que la posición de su país opta por facilitar un proceso de diálogo para buscar una solución en el país.
“La solución tiene que ser un acuerdo entre venezolanos, a través de un proceso democrático”, expresó a su llegada a la reunión el ministro de Relaciones Exteriores español, Josep Borrell, quien descartó que esta pase “por una intervención militar”.
Esta posición la reafirmó el secretario de Estado español para la Cooperación Internacional y para Iberoamérica y el Caribe, Juan Pablo de Laiglesia, que defendió que los conflictos en Venezuela se resolverán “a través del diálogo” y no por la “imposición” en el seminario Diálogos con América Latina, celebrado en Casa América.
De Laiglesia expresó que hay en la comunidad internacional una ausencia de iniciativas para enfrentar la situación de Venezuela y reconoció que es “necesario” trabajar para generar las condiciones para el dialogo político.
Cero diálogos. La vicepresidente de la Subcomisión de Derechos Humanos del Parlamento Europeo, Beatriz Becerra, luego del encuentro en la Unión Europea, insistió en que no existen las mínimas condiciones para entablar un diálogo con la dictadura de Maduro. “Se mantienen las sanciones y se apoya a la oposición democrática”, escribió en su Twitter.
Mientras que Pablo Casado, presidente del conservador Partido Popular, la formación más importante de la oposición española, pidió al gobierno de Pedro Sánchez que “se mantenga firme” ante el jefe del Estado venezolano, Nicolás Maduro.
Dentro de los partidos. AD, Voluntad Popular y la coalición Soy Venezuela negaron de plano la posibilidad de ir a un diálogo con el gobierno. Juan Guaidó, diputado de Voluntad Popular, aseguró que el espacio natural de diálogo en cualquier país es el Parlamento.
Agregó: “Hay dos elementos fundamentales para resolver la crisis política: respeto a la Asamblea Nacional y que se realicen elecciones democráticas”. Resaltó que la UE ratificó su posición al lado de la democracia venezolana, al mantener la presión contra “un régimen que no respeta reglas”.
Édgar Zambrano, diputado de AD, indicó que el gobierno sepultó el diálogo directo, al incumplir los formatos anteriores, en los que no mostró voluntad política democrática para apalear la crisis en el país. Señaló que cualquier iniciativa de diálogo, promovida de buena fe, “nace contaminada o mueren al nacer”.
Añadió: “Hemos vivido cuatro intentos de diálogo frustrados por la intransigencia del gobierno en subsanar su fracasado modelo político, que ha conducido a la población a la inopia total”.
Soy Venezuela, integrado por Vente Venezuela, Alianza Bravo Pueblo, Movimiento Libertario y Gente Emergente, a través de un comunicado rechazó la política de los partidos españoles Podemos y Partido Socialista Obrero de España para “darle oxígeno” al gobierno de Nicolás Maduro al promover un diálogo.
Destacó que cualquier intento de negociación “con un régimen que nunca ha honrado sus compromisos, mantiene una persecución política brutal y se vale de una espuria asamblea constituyente para validar un fraude constitucional que los mantendría en el poder”, significa un desastre para Venezuela.
La facción 16 de Julio solicitará hoy al Parlamento declarar como persona non grata al ex presidente de España José Luis Rodríguez Zapatero, por su insistencia en reactivar un “falso diálogo” a costa de la crisis humanitaria que vive Venezuela.
Allende las fronteras, la Organización de Venezolanos Perseguidos Políticos en el Exilio considera inaudito que el gobierno de España proponga impulsar un diálogo en Venezuela, cuando el país está bajo “un régimen asesino e ilegítimo”.
“La negociación es por la AN”
El diputado Luis Florido, quien participó como miembro de la delegación opositora en la mesa de diálogo en República Dominicana, aseguró que actualmente no están dadas las condiciones para un proceso de negociación con el mismo formato de esa oportunidad.
“Hay que ver si el gobierno está dispuesto a dar lo que los venezolanos queremos, que son elecciones libres con un Consejo Nacional Electoral equilibrado, con unas condiciones adecuadas en una fecha pactada”, expresó.
Resaltó que para que pueda dar resultados cualquier proceso de verdadera negociación, debe hacerse con la Asamblea Nacional, que es el poder legítimo elegido por el pueblo en el que están representados todos los partidos y el país. Agregó que debe tratarse el problema de fondo, que es “¿cómo hacemos para que los venezolanos tengan la posibilidad de sacar este gobierno en paz?”.
“La solución tiene que ser un acuerdo entre venezolanos, a través de un proceso democrático” Josep Borrell,
ministro español
de Relaciones Exteriores