El repudio al asesinato de Oscar Pérez y de sus seis compañeros reunió a centenares de ciudadanos en Caracas. Ayer, en una concentración en Parque Cristal, convocada por el partido Voluntad Popular, los manifestantes rechazaron el operativo policial del pasado 15 de enero en El Junquito, el cual calificaron de violatorio de los derechos humanos.

En la morgue de Bello Monte y en el cementerio del este familiares de los asesinados –que según el gobierno iban a sublevarse contra el presidente Nicolás Maduro– forcejeaban con los funcionarios de la GNB para que les permitieran ver los cadáveres. Paralelo a eso, en la avenida Francisco de Miranda, un grupo de personas  honraban la memoria de las siete personas y gritaban al viento: “¡Basta ya de muertes!”, “¡Justicia!” y “¡Asesinos!”. 

“Eso fue una masacre, no tiene otro nombre y mientras vivamos en dictadura van a suceder este tipo de cosas”, advirtió Blanca Contreras, una de las manifestantes que con pancartas, banderas de Venezuela y vestimenta blanca formó parte de la conglomeración de personas que homenajearon al ex agente del Cicpc Oscar Pérez y a sus compañeros.

Al lugar llegaron dirigentes de los partidos de la oposición. Entre ellos, el jefe de la fracción parlamentaria de la MUD, Juan Guaidó, y el diputado Juan Andrés Mejías. También estuvieron los concejales del municipio Libertador Jesús Armas (PJ) y Rogelio Díaz (Copei).

Mejías exigió al gobierno nacional respetar el derecho a la vida y el dolor de los familiares del grupo de personas que murieron en el ataque policial. “Permítanles tener un velorio en paz, que las familias les dén un último adiós como se lo merecen”, agregó.

Informó que desde la Asamblea Nacional van a agotar las instancias nacionales y en caso de que no haya respuesta acudirán a organismos internacionales para denunciar lo que ha ocurrido con el caso.

Mariana Bantines, otra de las manifestantes, criticó el trato que le han dado las autoridades a los familiares de los fallecidos, lo que considera “una barbarie del gobierno”.

Pasado el mediodía, el grupo de personas rezó un rosario por el descanso eterno de las siete víctimas. También honraron su memoria con un minuto de silencio y con las notas del Himno Nacional.

“Que la desesperanza no sea la que honre a todos los caídos. Los honraremos con un largo y duro año de combate que comienza hoy”, manifestó Sairam Rivas, secretaria general de Bandera Roja, quien estuvo presa por 132 días en la sede del Sebin.

La joven también pidió oraciones por los presos políticos que hay en el país y por los miles de ciudadanos que se encuentran con procesos judiciales abiertos por manifestar su descontento con el gobierno de Maduro.

Mejías, coordinador político (encargado) de Voluntad Popular, reiteró el llamado a declarar a las autoridades que fueron citadas por el Parlamento.  “No existe ninguna justificación para este asesinato. Todos pudimos ver cómo estas personas se rindieron. No hay explicación posible para que se haya hecho lo que se hizo”, expresó.

El diputado indicó que el país está en la calle exigiendo un cambio: “Si la respuesta va a ser represión, muerte y bombas lacrimógenas, la reacción de la gente no va a ser quedarse en casa”.


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