El general Kim Yong Chol, brazo derecho de Kim Jong-un, se reunió con el jefe de la diplomacia estadounidense Mike Pompeo para concretar la histórica cumbre entre el presidente Donald Trump y el líder norcoreano.
El objetivo de las conversaciones realizadas este miércoles es acabar de planificar la cumbre del 12 de junio en Singapur y acelerar los preparativos, una semana después de la carta de Trump a Kim Jong-un en la que el mandatario estadounidense suspendía su inédito encuentro cara a cara, criticando la «hostilidad» del gobierno norcoreano.
El general Kim Yong Chol, que llegó proveniente de Pekín a bordo de un vuelo de la compañía Air China, según un portavoz de la misión norcoreana en Naciones Unidas, es el funcionario norcoreano de mayor rango en pisar suelo estadounidense en 18 años.
Pompeo estaba acompañado por Andrew Kim, jefe de la sección Corea de la CIA.
Washington exige a Pyongyang una «desnuclearización completa, verificable e irreversible» antes de cualquier liberalización de las pesadas sanciones internacionales que afectan a Corea del Norte en represalias por sus programas nucleares y balísticos.
De su lado Pyongyang aceptó discutir una desnuclearización pero rechaza que sea unilateral, una distinción que amenaza con no coincidir con la de los estadounidenses, en tanto Corea del Norte considera a su arsenal como una garantía de la supervivencia del régimen.