En la primera sesión ordinaria de 2019, la Asamblea Nacional remitió un anteproyecto de ley de transición democrática a la Comisión para la Defensa de la Constitución –creada por el Legislativo–, que permita establecer una ruta política para que “cese la usurpación de Nicolás Maduro, se instale un gobierno de transición y se celebren elecciones libres”.
Juan Miguel Matheus, diputado de Primero Justicia, explicó que el anteproyecto establece la redacción de un estatuto enmarcado en el artículo 233 de la Constitución, que admita renovar el Poder Ciudadano, el Electoral y el Judicial en un Consejo de Transición que esté liderado por el Parlamento, “aferrado a sus competencias y a la Constitución”, y que se sume, junto con el apoyo de la comunidad internacional y a la “movilización popular, en rechazo a la usurpación”, a la lucha por la restitución del orden constitucional.
El también abogado constitucionalista mencionó que la ley tendrá un apartado dedicado la justicia transicional, con el fin de decretar amnistía para oficiales de la Fuerza Armada, detenidos por motivos políticos. “Los oficialistas deben entender que es hora de la decencia y que hay que expulsar de Miraflores al usurpador”, indicó Matheus.
Además, incluirá disposiciones de transición económica que permitan “revertir inmediatamente la crisis humanitaria” y regulen el gobierno unitario de transición democrática. “Es importante que el país entienda que la oposición está preparada para la transición y para gobernar. Pueblo venezolano, salgamos a la calle a luchar; pueblo del mundo libre, profundicemos la solidaridad democrática con Venezuela; soldados de la República, aparten las bayonetas que sostienen a Nicolás Maduro en el poder y sirvan a la causa de la libertad”, enfatizó.
En su intervención, el presidente del Parlamento, Juan Guaidó, invitó a todos sectores del país a incorporarse a la creación de este marco normativo con el fin de ejecutarlo “lo más pronto posible”. Resaltó que para hacer efectivas las acciones de un Poder Legislativo en dictadura, hace falta el compás de todos los sectores de la sociedad y de la comunidad internacional que respaldan la causa democrática en el país.
“No hay concepción alegre en una dictadura. Maduro no va a entregar el poder. Debemos construir condiciones para hacer hábil la Constitución, las leyes del Poder Legislativo y la transición para que cese la usurpación”, aseguró.
Eustoquio Contreras, del Gran Polo Patriótico, afirmó que la “profunda crisis económica, moral y social” debe ser resuelta por los venezolanos y no por potencias extranjeras.
“El rol de la Asamblea es el de conducir un proyecto político que lleve al país a resolver sus propios problemas. Esta crisis es insostenible. Tendrá alguna salida, pero tiene que ser en el marco de la civilización y la democracia”, sentenció.
José Luis Pirela, de la Fracción 16 de Julio, recordó que existe un vacío de poder “porque hubo un fraude perpetrado por las cuatro rectoras del CNE”, por lo que le corresponde a Guaidó “asumir la Presidencia y articularse con la sociedad civil e internacional”.
“Hay riesgo en esta decisión y traerá un conflicto, pero qué mayor conflicto que las muertes por falta de alimentos y medicinas”, dijo.
Américo De Grazia, de La Causa R, propuso la creación de una gaceta oficial legislativa para poder publicar la ley cuando sea aprobada, sin que el Ejecutivo o el TSJ la frenen.
Acuerdo. El Legislativo aprobó la creación del Fondo de Recuperación de Activos Producto de la Corrupción. El acuerdo fue presentado por Freddy Superlano, presidente de la Comisión de Contraloría, y tiene como objetivo resguardar los recursos recuperados para que posteriormente, cuando retorne la democracia, sean devueltos al país para financiar políticas públicas que ayuden a solucionar la crisis humanitaria.
“No hay concepción alegre en una dictadura. Maduro no va a entregar el poder. Debemos construir condiciones para hacer hábil la Constitución, las leyes del Legislativo y la transición para que cese la usurpación”
Juan Guaidó,
presidente de la Asamblea Nacional