El diputado Gilber Caro, que se encuentra preso en el Centro de Formación del Hombre Nuevo El Libertador, en Tocuyito, estado Carabobo, inició una huelga de hambre para exigir que lo trasladen a otro lugar de reclusión. Amenazó con coserse los labios en caso de que su solicitud sea ignorada.
Debido a que considera que su integridad está en peligro, el dirigente de Voluntad Popular publicó en su cuenta de Twitter una carta en hojas de cuaderno para exponer su situación. “Me discriminan del resto de la población como si yo no tuviera derecho alguno a ser tratado con respeto; aislándome con el propósito de producir en mi psiquis un grado de tortura”, denuncia.
El 29 de agosto el fiscal del Tribunal Militar Sexto de Control que lleva el caso solicitó siete días de prórroga (que se cumplieron el 5 de septiembre) para conocer la causa.
Theresly Malavé, miembro de la defensa, indicó que Caro sufre de ansiedad debido a que se encuentra aislado y encerrado y no ha podido ver el sol desde hace seis meses.