Una carta del fiscal general militar dirigida al ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, advierte que la anarquía y el alto índice de criminalidad que impera en Venezuela parece haber contagiado los cuarteles. 

De acuerdo con el diario El Nuevo Herald, que tuvo acceso al documento, el funcionario expresa «gran preocupación» por un «desmedido incremento» en los casos de robos, deserciones y abusos de autoridad. 

En la carta se sugiere la necesidad de crear «con urgencia» una mesa de trabajo de alto nivel para tratar un problema que amenaza con salirse de control. 

“Respetuosamente le solicito que se estudie la posibilidad de implementar una mesa de trabajo con los Directores de Personal Militar con el objeto de fijar puntos de vista y buscar soluciones a esta problemática que está deteriorando nuestra Fuerza Armada Nacional Bolivariana”, manifestó el fiscal general militar, el general de brigada Edgar José Rojas Borges.

El fiscal considera en la carta que esta situación se debe en parte a la cultura de la impunidad: los soldados implicados en delitos son protegidos por sus superiores. «Se les conceden medidas cautelares (libertad condicional, suspensión condicional del proceso o de ejecución de la pena), observándose además que estos imputados son colocados en puestos de relevancia en la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, acto que lejos de ser ejemplarizante, es un estímulo para que continúen cometiendo delitos”. 

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