Diputados de la Asamblea Nacional (AN) rechazaron este miércoles desde el parlamento los hechos violentos presentados en Santa Elena de Uairén, estado Bolívar, el 23 de febrero en víspera del ingreso de la ayuda humanitaria.
Rommel Guzamana, delegado por los estados Apure y Amazonas, calificó como “trágica” la situación registrada. “Sacan de las cárceles a de El Dorado y Vista Hermosa a los presos, los uniforman y les dan fusiles. Tienen sitiado al pueblo. Tuvimos que huir a las montañas”, denunció.
Asegura que han tenido conversaciones con los familiares de los fallecidos, pero que la prensa no ha podido constatar estas muertes porque «los pranes tiene sitiados los hospitales y las morgues».
Responsabilizó Vladimir Padrino López; al presidente de la asamblea nacional constituyente, Diosdado Cabello, a Delcy Rodríguez y Nicolás Maduro de estas muertes y de la «persecución sangrienta y mortal» que obligó a los parlamentarios que exigían la ayuda humanitaria a huir por las montañas.
»Son unos asesinos y tienen que pagar. Gracias a Dios que la pena de muerte no existe porque ellos tienen que pagar con cárcel, día a día, hora a hora y minuto a minuto», aseveró.
El diputado Ramón Flores condenó el asesinato de 25 pemones. “Acudiremos a instancias internacionales para denunciar delitos de lesa humanidad”, aseguró.
Por su parte, el abogado e internacionalista Fernándo Fernández denunció hay movimientos para borrar las evidencias de la actuación en contra de los pemones.