Tras cumplirse tres días de protestas, los comerciantes de varias zonas del centro y del centro comercial CIMA, en el Alto Barinas, se levantaron muy temprano y se dirigieron a sus locales para retirar su mercancía y llevarla a lugares más seguros, con el fin de evitar ser víctimas de la ola de saqueos que han ocurrido en la ciudad desde la noche del 22 de mayo.
Tiendas de ropa, bisutería, mueblería, charcutería, autoperiquitos e incluso consultorios odontológicos, han sido parte de los establecimientos que, por seguridad, han sido desocupados por sus dueños, y ahora permanecen cerrados.
Un propietario, que prefirió no identificarse, dijo: “Desocupamos el local, resguardamos la mercancía, y ahora nos toca esperar. La incertidumbre es muy grande”.
Otro entrevistado, que también pidió no publicar su identidad, manifestó: “Aquí nos encontramos a la suerte de Dios, no sabemos qué pueda pasar”.
Otro señaló que lo increíble es que fue activada la segunda fase del Plan Zamora, pero esto no trajo ningún beneficio porque la presencia policial y militar no se ve en ninguna parte del municipio Barinas.
También el diario La Prensa dejará de circular a partir hoy, debido a la falta de seguridad y transporte público o privado para susempleados, lo que complica continuar su normal operatividad, informó Alberto Santéliz Meléndez, director del rotativo.
En un comunicado, el diario destacó que el estado está paralizado y ello “obedece al miedo de la gente a salir de sus hogares para desplazarse hasta sus trabajos, por temor al vandalismo que campea sin control”.