La Policía Nacional Bolivariana resguardó a los manifestantes opositores durante la emboscada de colectivos ocurrida este miércoles en la Candelaria.
Los civiles armados llegaron disparando contra los detractores del gobierno, quienes intentaban mediar con la Policía para que los dejaran marchar hacia el Tribunal Supremo de Justicia.
Hubo por lo menos 30 detonaciones contra la movilización.
Los efectivos de la PNB persiguieron a los agresores y recuperaron material de un equipo de prensa que había sido robado.
El comandante Pérez de la PNB se desmarcó de las acciones de los colectivos: «Somos unas personas que garantizamos el orden a ustedes. Ninguno de nosotros anda armado. Cuando llegaron los vagabundos esos nosotros fuimos los primeros que nos colocamos delante de ustedes, garantizándoles la vida sin cargar los medios para combatirlos a ellos. Nosotros estamos usando medios pacíficos, porque ustedes han sido pacíficos», expresó ante los medios de comunicación.
Por su parte, el oficial Chacón le dijo a los atacantes que “no responde órdenes” de ellos.
Normalmente los colectivos armados dispersan las marchas opositoras con apoyo de la Guardia Nacional y no de la Policía.