El tiempo se acelera en el boulevard de Caricuao: la señora con las compras, los jóvenes con sus camisas azules escapados del colegio y el niño que trepa por las escaleras de un tobogán se mezclan con el vendedor de café, el “Perejil”, que asegura que Genis Miranda y Omar Balda son parte de la cultura local y que todos los conocen.

No en balde, Onice, la banda de reggae de la que Miranda es miembro desde hace 31 años y Balda desde hace 2 años, ambos como tecladistas, está integrada por talento de la zona. Rafael Miranda y Jesús Daniel González están a cargo de las guitarras, Darwin Quintero del bajo, Franklin Díaz de la batería y Gabriel Silva de la trompeta.

La banda cumple 31 años de vida / Cortesía: Onice

El grupo se presentará hoy en la Sala de Conciertos del Centro Cultural BOD, con un programa concebido para celebrar el doceavo aniversario de Cresta Metálica Producciones, cuyo trabajo es promover el talento nacional en distintas plataformas.

Junto a ellos estará Plan 9, una banda de rock que se caracteriza por hacer fusiones con otros géneros. La academia de danza Sombras Tribal también estará presente en el acto.

Caricuao es salsera, afirma Genis Miranda: “Esa es la música que lleva en las venas la gente de aquí”. Esto hace que se sienta aún más orgulloso de que el reggae haya encontrado un espacio privilegiado en el imaginario del lugar. El género logró calar por la conexión con las raíces africanas que comparte la música del Caribe con el ritmo jamaiquino y lo que de este se derivó como el reggaeton, asegura.

Caricuao siempre ha sido un bastión del reggae, dice Miranda. Onice es una familia que ha mantenido unida durante 31 años. Varias personas se acercan a saludarlos o, simplemente, gritan desde lejos: “¡Adiós, cantantes!”.

Cuando Onice se formó todos comenzaron desde cero, aprendieron a tocar el instrumento y a llevar el ritmo que escogieron. En los ochenta, había mucho entusiasmo por la movida. Hoy Miranda lamenta sean tan pocas las iniciativas nuevas. “Ahora mismo lo común son las deformaciones de alineaciones originales: solistas que se unen a otros grupos o bandas que integran músicos. Pero no hay tantos conceptos nuevos”.

Para Balda, uno de los integrantes más nuevos y jóvenes de Onice, tocar en el grupo ha sido el sueño de su infancia hecho realidad. Se confiesa admirador de la alineación original, que escuchó desde que tiene memoria: “Genis ha sido una inspiración para mí siempre. Poder estar aquí es una escuela y una experiencia de crecimiento increíble”, comenta.

Miranda recuerda claramente su primer show el 23 de julio de 1988. En la terraza debajo de la vía del Metro, justo al lado de la salida de la estación Zoológico, fue el lugar donde se puso una tarima en la que debutó ante su gente.

Las circunstancias han cambiado. “En aquel momento podíamos abordar temas de problemática social con más libertad. Ahora esto puede comprometerte, es un gesto más valiente”, dice Miranda.

“Onice está a favor de que cada quien exprese su punto de vista, los vemos a todos como público. Si hay problemas, entonces hay responsables. Pero el pueblo es el pueblo”, refiere el fundador. Y agrega que ellos intentan mantener sus opiniones personales separadas de la agrupación, porque siempre han buscado que su música sea un respiro en la atmósfera de paranoia que enfrenta la gente.

Para todos fue una sorpresa poder tocar este año. “En el país hacer arte se ha vuelto difícil. El espectáculo de aniversario de Cresta Metalica en el BOD es una bendición, no lo esperábamos”, asegura Miranda. Los miembros de Onice revelaron que habrá sorpresas en su en su presentación como la invitación a Pedro Pérez Márquez de PP’S para cantar una versión de “Camino a Jamaica”.


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