Un avión ruso privado partió hoy desde El Cairo con más restos de las víctimas mortales de la aeronave siniestrada el sábado pasado, en la península egipcia del Sinaí, en un controvertido incidente que causó la muerte de sus 224 ocupantes.Varias ambulancias transportaron los restos de los cadáveres en compañía de un representante de la embajada rusa en Egipto, según informó la agencia oficial de noticias MENA.En el avión viajaron también 19 rusos del equipo de investigación y rescate que tenían a cargo la búsqueda de cadáveres en la zona de El Hasana, donde cayó el avión ruso.El Ministerio ruso de Emergencias explicó que, además de víctimas, el avión trasladó pertenencias personales y documentos encontrados en el lugar del siniestro.El Airbus A-321 de la compañía rusa MetroJet (Kogalymavia) se destruyó en el aire a los 23 minutos de despegar, según las informaciones filtradas.Egipto descarta la hipótesis de un ataque terrorista y pide esperar al fin de las investigaciones.  El presidente de Estados Unidos, Barack Obama, afirmó ayer que «es ciertamente posible que hubiera una bomba» en el avión ruso. Los servicios secretos británicos creen que un explosivo fue colocado en la bodega.  


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