El presidente de  Rusia, Vladimir Putin, ordenó el despliegue de misiles antiaéreos S-400 en Siria, luego de que Turquía derribó uno de sus aviones de guerra. Informó que los misiles de defensa aérea serán enviados a la base de Hemeimeem en la provincia costera de Latakia, a 50 kilómetros al sur de la frontera con Turquía, para garantizar la seguridad de vuelo de los aviones  rusos. La maquinaria de alta precisión posee un alcance de 400 kilómetros de altura.El ministro de Defensa, Sergei Shoigu, indicó que el crucero Moskva, que porta los misiles, se encontraba cerca de la costa para proteger las aeronaves rusas en su misión. ?Estará listo para destruir cualquier objetivo aéreo que represente una posible amenaza a nuestros aviones?, dijo Shoigu en una reunión con funcionarios militares. Pese a que Ankara alegó que el avión militar S-24 fue derribado por desobedecer las repetidas advertencias de haber entrado en el espacio aéreo turco, el piloto sobreviviente, rescatado por comandos del Ejército sirio, afirmó que nunca recibió una advertencia antes de que le dispararan. «No hubo una advertencia, ni por radio ni visual. No hubo ningún contacto», dijo Konstantin Murajtin.En la reunión de la Organización de Cooperación Islámica en Estambul, el presidente turco, Recep Tayyip Erdogan, aseveró que su país no quiere una escalada de las tensiones con Moscú, por lo que está a favor de la ?paz, el diálogo y la diplomacia’.Sin embargo, el canciller ruso, Sergey Lavrov, calificó de ?provocación planeada? el incidente, y agregó que poseen información que confirma que el ataque de Turquía fue un acto ?premeditado y planificado de antemano?.Lavrov, que descartó una guerra contra Turquía, le dijo por teléfono a su homólogo turco, Mevlüt Çavusoglu, que Turquía «se había puesto del lado del Estado Islámico» al derribar un avión que cumplía una misión de bombardeo contra el grupo yihadista.Despliegue de tropas. El gobierno de Alemania enviará 650 soldados adicionales a Malí en apoyo a Francia, que está concentrando esfuerzos en la lucha contra el Estado Islámico, informó la ministra de Defensa, Ursula von der Leyen: ?Queremos y debemos estar junto a Francia y hacer todo lo posible para ayudar en esta situación difícil». Señaló que la iniciativa pretende respaldar la misión de la ONU en Minusma, Malí, que vela por la aplicación de un acuerdo de paz entre el gobierno y los rebeldes del norte del país. Francia está implicada militarmente en la zona desde enero de 2013 con el objetivo de luchar contra los yihadistas.


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