Mañana París será el punto de encuentro de la Cumbre del Clima COP21, planteada como ?la última oportunidad? para la Tierra, en la que se reunirán líderes de todo el mundo para buscar el primer acuerdo universal y vinculante sobre el calentamiento global y discutir un protocolo que sustituya al de Kioto, que se empezaría a aplicar a partir de 2020.  De los 195 países firmantes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático, aproximadamente 150 jefes de Estado y de gobierno confirmaron, hasta la semana pasada, su participación. Los presidentes de Estados Unidos, Barack Obama, de China, Xi Jinping, de Brasil, Dilma Rousseff, y de México, Enrique Peña Nieto, así como la canciller de Alemania, Angela Merkel,  figuran entre los líderes que asistirán. Juan Carlos Sánchez, profesor de Cambio Climático de la UCV, destacó la necesidad de realizar la cumbre a pesar de las amenazas terroristas. ?Es especialmente trascendental porque se esperan que tomen una decisión, luego de que finalmente Estados Unidos y China, las grandes potencias que más gases emiten, se pusieron de acuerdo sobre la firma del tratado?. Agregó que gracias a que estas dos naciones lo suscribirán, más países pequeños se podrán unir.   El Protocolo de Kioto (1997), que se busca reemplazar, fijó las metas de reducción de gases que tienen que acometer solo países desarrollados. El problema fue que únicamente consideró 37 Estados y se quedaron fuera China, que no estaba dentro de las naciones desarrolladas, y Estados Unidos, que no lo ratificó.  La diferencia importante de este encuentro será la firma de tratados vinculantes, que tomen en cuenta las iniciativas de los países y la integración de otros no desarrollados.  Entre otros objetivos, la cumbre espera acordar acciones para que, a final de siglo, la temperatura del planeta no sobrepase en dos grados centígrados la que se registraba en el siglo XIX antes de la industrialización y reducir el consumo de combustibles como carbón y gasolina. Al fracaso de Kioto le siguieron cumbres como la de Copenhague (2010) y la de Varsovia (2013), en las cuales no hubo grandes conclusiones.   Hermetismo. Venezuela se encuentra entre los países que no enviaron propuestas a la cumbre, junto con Panamá, Nicaragua, Libia, Sahara Occidental, Nigeria, Angola, Siria, Uzbekistán, Nepal, Corea del Norte, Sri Lanka, Taiwán y Malasia.  Sánchez señaló que hay un ?hermetismo oficial acerca de la propuesta venezolana?. Pero a pesar del silencio cree que hay tres ideas que Venezuela pudiera llevar a cabo para lograr los objetivos de la cumbre: 1. Reducir las emisiones de la industria petrolera, como eliminar el venteo del gas hacia la atmósfera. 2. Eliminar los subsidios de combustibles, a los países de Petrocaribe y a los venezolanos; no solo de gasolina sino de diesel. El docente afirmó que al año se pierden alrededor de 38 millardos de dólares para que ?la factura de gasolina sea regalada para los venezolanos?. 3. Que el dinero del subsidio se utilice en las energías renovables y ?se elimine el despilfarro?. La Organización Meteorológica Mundial resaltó que los más afectados por las consecuencias del cambio climático son los países isleños, incluidos miembros de la Caricom y de Petrocaribe. Son estos los que han puesto el énfasis en bajar la meta de temperatura global de 2 a 1,5 grados.  Sánchez explicó que esto se debe a que, de llegar a un acuerdo, ?disminuirá la demanda de hidrocarburos y petrolera?. ?Los países de Petrocaribe tratarán de buscar acceso, a través de los países desarrollados, a las energías renovables a bajo costo para dejar el petróleo y sustentar sus economías. A corto plazo necesitarán de Venezuela, pero a largo plazo les convienenlas energías renovables?.  El Nacional intentó comunicarse, sin éxito, con voceros de la delegación de Venezuela para conocer sus propuestas. La embajadora en Bruselas, Claudia Salerno, informó que la misión venezolana llegó a París el miércoles. 


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