Los equipos de rescate indonesios encontraron con vida, una semana después del terremoto y el tsunami, a 31 menores que habían quedado atrapados en dos colegios ubicados en la isla de Célebes.
Los menores fueron rescatados en dos centros de formación profesional, 23 de ellos en un colegio y ocho de ellos en otro.
Yusuf Latif, portavoz del equipo de rescatistas, no pudo precisar la edad de los estudiantes que quedaron aislados sin ningún adulto en estos centros educativos a los que suelen acudir alumnos de entre 15 y 17 años.
«La catástrofe ocurrió en viernes por lo que (los adolescentes) todavía estaban estudiando en las escuelas», dijo Latif, quien aseguró que todos los jóvenes ya se encuentran de vuelta con sus familiares.
La agencia de rescate indicó que el gobierno extenderá el periodo de búsqueda en la región hasta 14 después del desastre y que luego se decidirán los pasos a seguir.
Las autoridades elevaron hoy a 1.649 el número de muertos provocados por el terremoto, el tsunami y las avalanchas de barro que afectaron la región central de Célebes.
Más de 1.000 personas continúan sepultadas bajo los escombros y el barro, según estimaciones oficiales y de ONGs.