Desde su llegada el pasado domingo a Cuba, el presidente de Estados Unidos, Barack Obama, contó con la ayuda de una traductora, su hija, Malia.La joven de 17 años ayudó al mandatario estadounidense a comunicarse con comerciantes de La Habana, en el paseo que realizaron tras su llegada a la isla. Además, también sirvió de intérprete para que su padre se comunicara con el dueño del restaurante donde cenaron el domingo.?El presidente y Malia se ríen juntos, al mismo tiempo que ella traduce a su padre al español para conversar con el dueño de un restaurante en La Habana?, escriben los responsables del Facebook oficial del mandatario como acompañamiento a una de las cuatro imágenes que han compartido, captadas por el fotógrafo de la Casa Blanca, Pete Souza.Malia domina a la perfección el español. Comenzó a estudiarlo en el instituto, pero continuó perfeccionando el idioma hasta ahora, que no solo logra manejarse en las conversaciones habituales del día a día, sino que es capaz de traducir en contextos más técnicos, reseñó El Confidencial. «Uno de mis grandes arrepentimientos de mis años en la escuela es que fui demasiado bufón y y no perfeccioné mi español. Mi acento es bastante bueno, pero mi vocabulario es el de un niño de dos años», dijo posteriormente sobre el evento Obama a la cadena CBS.


El periodismo independiente necesita del apoyo de sus lectores para continuar y garantizar que las noticias incómodas que no quieren que leas, sigan estando a tu alcance. ¡Hoy, con tu apoyo, seguiremos trabajando arduamente por un periodismo libre de censuras!