Julian Assange, fundador de WikiLeaks, ha mostrado ingratitud e irrespeto hacia Ecuador pese a que Quito le da asilo en su embajada en Londres desde el año 2012, declaró el viernes la cancillería.
“Al emitir informaciones que falsean la verdad, el asilado y sus asociados expresan una vez más ingratitud e irrespeto hacia el Ecuador, en lugar de mostrar agradecimiento al país que lo ha acogido por casi siete años”, indicó la Cancillería en un comunicado.
La reacción ministerial se produjo luego de un tuit de WikiLeaks en el que asegura que Quito y Londres tienen un acuerdo para que en horas o días Ecuador expulse a Assange de su embajada para ser arrestado por las autoridades británicas.
De acuerdo con el portal, el gobierno ecuatoriano expulsará a Assange bajo el pretexto de que la organización ha divulgado fotos, videos y conversaciones íntimas del presidente Lenín Moreno almacenadas en sus dispositivos móviles.
Por otro laso, el canciller José Valencia indicó que el gobierno no hará comentarios sobre los actuales rumores infundados. El jefe de la diplomacia ecuatoriana resaltó que las noticias sobre una presunta salida de Assange de la legación vienen hace meses.
La cancillería, por su parte, recordó que conceder el asilo diplomático es una facultad soberana de Ecuador, que tiene por tanto el derecho de otorgarlo o terminarlo cuando lo estime justificado.
El fundador de WikiLeaks debe cumplir desde octubre un protocolo que regula sus visitas, comunicaciones y salubridad dentro de la embajada. Su incumplimiento derivará en la terminación del asilo, de acuerdo con el documento.
Las normas fueron impuestas por Quito ante lo que considera constantes injerencias de Assange en asuntos internos de Ecuador y de otras naciones.
A raíz de la difusión de la información privada de Moreno en redes sociales y el portal inapapers.org, el gobierno presentó una denuncia ante un relator de la ONU.