Donald Trump, presidente de Estados Unidos, llegó este viernes a Florida donde se reunirá con los gobernantes de varios países caribeños para tratar la cooperación regional y la crisis venezolana.

El presidente estadounidense se trasladó desde el aeropuerto a Mar-a-Lago, la propiedad que tiene en Palm Beach, donde se celebrará una reunión con los presidentes Danilo Medina de República Dominicana y Jovenel Moïse de Haití, y los primeros ministros Hubert A. Minnis de Bahamas, Andrew Holness de Jamaica y Allen Michael Chastanet de Santa Lucía.

Trump «utilizará esta reunión como una oportunidad para agradecer a estos países su apoyo a la paz y la democracia en Venezuela», anunció el martes la Casa Blanca.

Bahamas, Haití y República Dominicana forman parte del medio centenar de países en el mundo que, liderado por Estados Unidos, ha reconocido a Juan Guaid como mandatario interino de Venezuela.

La mayoría de los líderes de la Comunidad del Caribe reiteró su posición de «no interferencia» en los asuntos venezolanos en su reciente reunión interanual celebrada en San Cristóbal y Nieves, el pasado mes, y se mostró partidaria de buscar una solución pacífica a la crisis venezolana.

Algunos de los temas a tratar en la reunión con los gobernantes caribeños serán «seguridad, energía, oportunidades de inversión y ampliación del comercio», de acuerdo con un breve boletín de la oficina de Chastanet, en el que se indica que el tema de la crisis en Venezuela también estará sobre la mesa. 


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