El partido de la Candidatura de la Unidad Popular exigió en un comunicado que la nueva presidencia del Parlamento catalán deberá ?recaer en una opción de consenso, no ligada al ciclo anterior, que abra una nueva etapa no vinculada a los recortes, a los casos de corrupción ni a una gestión del proceso que a menudo ha primado los intereses de partido, confundiéndolos con los del país?, reportó El País de España.Con esta exigencia, la CUP estaría cerrando el paso a Artur Mas, que disputa la reelección como presidente del Parlamento, y ha sido acusado en reiteradas ocasiones por el partido anticapitalista de haber cometido actos de corrupción durante su presidencia.En el texto, donde detallan sus pedidos mínimos en las negociaciones con Junts pel Sí, el partido independentista dio un margen de 18 meses para fundamentar la república de Cataluña.Pese a la impugnación del Tribunal Constitucional de España del recurso secesionista aprobado por el Parlamento catalán, el movimiento prevé que los siguientes pasos para consolidar la república serán un ?calendario de ruptura? y formar ?mesas de diálogo?.El oficio también establece que una ruptura democrática, un plan de choque y un proceso constituyente serán los tres ejes principales de las mesas de debate con el partido de Mas, con el lema del movimiento: ?Independencia, pobreza cero y basta de corrupción?.Debates antes de la investidura. El partido anticapitalista aseguró que no habrá un nuevo presidente antes de finales de noviembre, cuando se realice un debate a puerta cerrada para decidir un ?mejor candidato? para el cargo. «El 29 de noviembre habrá una jornada de debate grande para la militancia. No se tomará una decisión sin que se haya dado un debate interno», declaró un vocero del partido anticapitalista a AFP.El JxSí y la CUP solo respaldarán al partido de Mas sí este se retira y propone a otro candidato, tienen hasta el 9 de enero para alcanzar un acuerdo. De no ser así, tendrían que convocar nuevas elecciones regionales, las cuartas en la historia de Cataluña en menos de seis años.La CUP reiteró también que al no apoyar ningún Ejecutivo hasta que se valide su militancia, el secretariado, deberá convocar una Asamblea Nacional abierta, en la que participen todas las organizaciones, incluidas las de Valencia, Palma y Perpiñá, y donde se debata quién debe ser el nuevo presidente.A pesar de no estar a favor de Mas, la CUP rechazó que se celebren otras elecciones anticipadas en marzo, motivo por el que ratificó su voluntad de lograr un acuerdo ?para avanzar firmemente hacia la república catalana?, sin intención ?de abandonar la mesa de negociación en ningún momento?.Entretanto, Mas llamó al partido a crear «puentes hacia la libertad» en «este momento de una cierta tensión política».


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