Colombia planteó este viernes ante la Asamblea General de la Organización de Estados Americanos armonizar la respuesta regional frente a la migración de venezolanos castigados por la crisis, y considerar la opción de darles trato de refugiados.
“Lo necesario en este momento es que avancemos en la toma de decisiones de naturaleza regional mediante la armonización de medidas migratorias”, señaló el canciller colombiano Carlos Holmes Trujillo durante la reunión de la OEA, que se celebra hasta este viernes en la ciudad de Medellín.
Holmes hizo el llamado a los países miembros, después de un informe que un grupo de trabajo del organismo presentó más temprano sobre los efectos del éxodo masivo de los venezolanos.
Los expertos propusieron otorgar el estatus de refugiados a los migrantes para garantizar su protección permanente con derecho a la identidad, acceso a servicios como la salud y educación, así como la oportunidad de insertarse en los mercados laborales.
«Me parece que este material que hoy recibimos debe ser materia de discusión», señaló el canciller en el último día de deliberaciones.
De acuerdo con la Organización de las Nacones Unidas, cuatro millones de personas emigraron de Venezuela desde 2015 debido a la crisis económica, mientras que siete millones de personas requieren atención humanitaria urgente.
Solo Colombia, que comparte una frontera de 2.200 kilómetros con Venezuela, ha recibido 1,3 millones de migrantes.
Sin embargo, Perú y Ecuador, segundo y tercer país receptores de la migración, se mostraron más reservados en cuanto a la posibilidad de ampliar sus facilidades migratorias.
Néstor Popolizio, canciller de Perú, enfatizó la necesidad de regular el flujo, para que se tenga la máxima seguridad no solamente para el migrante venezolano que llega, sino para los países de acogida.
José Valencia, canciller de Ecuador, insistió en tener una migración ordenada y regularizada para evitar brotes de xenofobia.
Perú, que ha recibido a alrededor de 800.000 migrantes venezolanos, exige visa humanitaria y pasaporte a los nuevos solicitantes de ingreso desde el 15 de junio.
En Ecuador, donde se estima que han llegado alrededor de 263.000 venezolanos en cuatro años, se les pide pasaporte vigente.